Yo no busco novio. Estoy genial solo. A mí es que esto de estar buscando una media naranja que en realidad no se me ha perdido como que no me convence. Ni que fuéramos a hacer zumo.

Si yo estoy muy bien así. Soy muy feliz. Además entre el trabajo, mi día a día, los quehaceres de casa, los amigos, los compromisos sociales y los ratitos que me guardo para estar solo conmigo mismo no me cabe un novio. Tendría que dejar de hacer muchas cosas, porque yo necesito mi espacio. Claro.

Y luego están las dudas. Que si le gusto de verdad, que a dónde vamos con esta historia, que si va a salir bien, que si le dejaré de gustar, que si me comporto de esta u otra forma porque, dependiendo de lo que haga, la relación va a funcionar mejor o peor…

Además cuando tienes novio como que dejas de ser un poquito tú mismo. A ver, no es que te conviertas en otra persona, pero cambias aunque sea un poco tu comportamiento. Te cortas de hacer ciertas cosas o no hablas de estos u otros temas porque esas cosas no son para hablarlas con un novio. No sé, como que te pones en modo «tengo novio» y empiezas a actuar como te han enseñado a hacerlo en esas situaciones. Porque la gente con novio no se comporta igual que la gente soltera.

¿Verdad?

O a lo mejor no.

Porque de repente un día aparece él. Y mira que tú no lo andabas buscando, pero va y aparece. Así, como de la nada. Y ocurre algo raro porque, contra todo pronóstico, no dejas de ser tú cuando estás con él. Todo es fácil. Sigues siendo tú mismo. Incluso mejor aún: eres una versión mejorada de ti.

Te levantas feliz por las mañanas. Te miras al espejo y te ves radiante, guapísimo. Y sonríes. Ya no estás preocupado por esos pequeños detalles que antes te generaban dudas, y no tienes que dejar de hacer las cosas que siempre hacías, porque con él todo encaja. No te comportas de manera distinta, porque no tienes que dejar de ser tú en ningún momento. Es más: cuando estás con él eres más tú que nunca.

Y compartes todo con él porque, además de tu novio, es tu amigo. Y es un amigo cojonudo, que te escucha, te respeta y que, tomes las decisiones que tomes, él siempre te apoya y está ahí para aconsejarte y sujetarte si te caes.

Y estás seguro de ti. Y estás seguro de él. Y cuando estás con él te sientes la persona más especial del mundo. Porque lo eres. Y no tienes que esforzarte en ser otra persona para gustarle, porque tú eres maravilloso.

Y entonces te das cuenta de lo que es el amor. Porque amar, además de querer a la otra persona, es quererte a ti cuando estás con ella.

Y que dure lo que dure. Ojalá sea para siempre. Pero tú no te preocupes por eso, solamente preocúpate de vivir el momento y de disfrutar cada instante de esta aventura. Porque el amor no es lo que puede llegar a ser, es lo que está siendo.

YouTube video