CUANDO MENOS TE LO ESPERAS 11: Parte final I

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    Científica emperdernida on #357812

    HOla lectoras,

    En la publicación del anterior capítulo, ya había anunciado que esa historia está apunto de terminar. Como me quedaban varias cosas pendientes, he decidido subir el último capítulo en partes par que no se haga demasiado largo.

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    CUANDO MENOS TE LO ESPERAS 11: capítulo final I

    Cuando baja Mikel de casa aún estoy en shock. ¿qué es lo que acabo de ver? ¿mi amigo Jorge y su abuelo se conocen? ¿de qué?

    “no te puedes imaginar lo que me acaba de pasar!”, le suelto a Mikel en cuanto le veo. Me besa y me dice “tranquila, ya sé que has conocido a mi abuelo. Me lo ha contado. Le he hablado tanto de ti que es como si te conociera ya”. Ese comentario hace que me ruborice y me ponga colorada. “Le has entrado por buen ojo, me ha dicho que te brillan los ojos…si él supiera lo que hemos hecho esta tarde y lo que quiero volver a repetir esta noche…”. Bajo la mirada muerta de la vergüenza. “En realidad, no me refería a eso. Bueno, sí, un poco…pero, ¿tú sabías que Jorge y tu abuelo se conocían?”, le digo alzando un poco la voz. “¿qué Jorge?”, me dice. “A ver Mikel, ¿qué Jorge conocemos tú y yo?, contesto. “Calla, anda. ¿mi abuelo y Jorge? ¡eso es imposible! Debes de estar equivocada…le has debido confundir con otra persona”. Mikel insiste tanto ante la imposibilidad que se conozcan que me pone en duda. Igual es verdad que estoy equivocada y no era él. Eso explicaría por qué no me ha saludado.

    “Anda, deja de darle vueltas. Seguro que es alguien que se le parece y te has confundido”, me dice mientras me agarra de la cintura y me hace andar dirección al metro. Mikel me da la mano, me acaricia el dorso con su pulgar pero mi mente sigue dándole vueltas. A veces, mi cabeza es como una centrifugadora. No para.

    “¿seguro que quieres ir al cumpleaños?, me pregunta mientras cogemos sitio dentro del vagón. “claro, me apetece conocer tus amigos. Y más, si son como Rubén…me ha parecido muy vacilón y se mete mucho contigo. Me cae bien”, digo mientras se me escapa una carcajada. “Si no quieres, aun podemos ir a tu casa y no salir de la cama”, me susurra en el oído, al tiempo que se me eriza la piel. Este hombre tiene la capacidad de encenderme solo con una frase. Mikel, sabedor de su efecto, me besa. “¿la oferta caduca?”, le pregunto rompiendo el momento. Su respuesta me derrite. Oír de su boca con su voz sensual decir “nunca”, es lo mejor que me ha pasado en años.

    Llegamos al garito donde se supone que es el cumpleaños y me sorprendo de la poca gente que hay. Y yo que pensaba que llegábamos tarde. Mikel se acerca a la barra y habla con el camarero que hace un par de señas. Cuando Mikel se voltea, me agarra la mano y me besa “¿preparada, Rizos?”. Yo le correspondo a ese beso sin darme tiempo a contestar, tira de mí hacia un reservado.
    He de decir que nunca he estado en un reservado de un bar. Todo es nuevo para mí. En este caso es como una sala que está encima de la pista de baile. Hay varias personas a las que Mikel va saludando y presentándome pero, si os soy sincera no me acuerdo ni de los nombres. Está oscuro y la música está alta. Mikel parece llevarse a las mil maravillas con todos y todas. Me agarra de la cintura y me lleva al lado de la barandilla desde se ve la pista de baile. Me acerca una copa y empiezo a sentirme fuera de lugar. La gente allí va arregladísima y me doy cuenta que todo el mundo está bebiendo champán.

    Desde abajo veo como un grupo de chicas saludan a Mikel, medio a voces. No le ha dado tiempo a decirme que es la cumpleañera cuando ya están tres o cuatro chicas a nuestro lado. Mikel me aprieta más la mano y me la sigue acariciando. Me pongo tensa.
    “ainsss, Mikel…¿Qué vamos a hacer contigo??? ¿Qué calladito te lo tenías?”, grita una de las chicas mientras le planta dos besos a Mikel. Yo sonrío. Me mira mientras me doy cuenta que esa chica va vestida como si estuviese sacada de un reportaje de moda. “Hola, soy Cristina”, me saluda mientras también me da los dos besos de rigor. “Eres nuestra heroína, Amaia”, me dice y yo el miro a Mikel que tiene la misma cara de asombro que yo. “Tranquilo, Mikel…antes me ha llamado Rubén para contarme que venías a mi fiesta con una chica y, claro, todos hemos pensado que debe de ser muy especial porque nunca traes a nadie.”. Esa vez me toca a mí acariciar la mano de Mikel que sonríe.

    “Así que nos la quedamos un ratito, ¿vale?”, Cristina me separa de Mikel y le ordena ir a la barra y hablar con no sé quién. Entro en pánico. Necesito una cerveza. O dos. Tengo la sensación que me llevan al matadero entre todas esas chicas.
    La verdad que me esperaba este interrogatorio peor. Cristina y las demás amigas de Mikel son muy diferentes a mí pero muy majas. Se nota que le quieren. Me preguntan miles de cosas sobre mi vida y yo voy respondiendo como puedo porque a veces me bombardean a preguntas. Una incluso me pregunta de donde es la camiseta que llevo puesta. Le digo que no consigo recordarlo pero me acuerdo perfectamente que me la compró mi hermana en la tienda de debajo de su casa. Viendo sus modelitos, maquillajes y uñas, paso. Me voy relajando cada vez más. Veo a Mikel apoyado en la barra, no nos quita ojo de encima y eso me hace sonreir. Y veo que me devuelve la sonrisa alzando su copa.

    Al poco tiempo, se acerca con Rubén y con otro chico que se llama Jon (marido de Cristina). Y me siento más cómoda cuando Mikel se sienta en el sofá a mi lado y me abraza. Los chicos empiezan a contar historietas de cuando eran pequeños. Me río a carcajadas e intervengo en varias ocasiones. “Joder, Mikel.., me gusta esta chica. Tiene buen sentido del humor”, se ríe Rubén mientras alza su cerveza a modo de brindis. Resulta que sí hay cerveza y yo mataría por una. “¿quieres una birra?, me pregunta Mikel al oído. Asiento con la cabeza y veo como se dirige a la barra.

    “¿qué tal es Mikel en el trabajo?, pregunta Cristina. A mí me sorprende la pregunta porque es uno más. “a decir verdad, Mikel nos tenía un poco preocupados. Desde lo de Lucía no había vuelto a traer a nadie y no le veíamos bien. Todos lo pasamos muy mal pero él no creo que lo supere nunca”, explica Jon. Yo no sabía de qué me hablaban y el ambiente se había tensado un poco. Y sobre todo cuando Mikel volvió de la barra. “No puedes estar calladito, ¿no Jon?”, le gritó.

    “vamos a bailar un poquito, es mi cumpleaños y hay que darlo todo”, suelta de repente Cristina, rompiendo el mal rollo generado. Yo no entiendo nada. ¿Quién es Lucía? No sé si preguntar pero decido callarme porque la tensión se puede cortar con un cuchillo
    Vamos todos a la pista a bailar pero al bajar las escaleras me detengo y me abrazo a Mikel. “¿estás bien?”, le pregunto mientras rodeo su cuello y nuestras caras quedan a la misma altura. Juraría que el brillo de sus ojos se ha apagado un poquito pero me besa y me hace sonreír. Sus manos rodean mi cintura y poco a poco va bajándolas hasta mi culo. Yo le susurro en la oreja que como siga así, nos vamos a tener que marchar sin despedirnos ni nada. “vámonos”, me ordena y yole contesto que sería de mala educación haciéndole burla y zafándome del para llegar a donde están todos sus amigos ya.

    En la pista de baile lo doy todo. Siempre he sido muy bailonga, aunque lo haga fatal pero no puedo parar de reír. Hacía mucho tiempo que no me divertía tanto. Últimamente mi vida se había reducido a ver series los fines de semana y ya no me acuerdo de la última vez que salí. Y menos con mi ex. Ese era de desgastar codo en la barra. Justo lo contrario que Mikel, que baila y hace el ganso en todas las canciones y baila con cada una de nosotras. Y hasta a veces con Jon y Rubén. Son el descojono padre…mañana voy a tener agujetas de tanto reírme.

    Una de las amigas de Cristina, que creo que se llama Bea, lleva una borrachera considerable y Mikel y yo nos ofrecemos para acompañarla a buscar un taxi. Los demás también parece que se van a ir retirando así que decidimos irnos todos a casa. No sin antes prometer volver a vernos pronto.

    (nota: para lo pijos que parecían, son muy agradables. Con lo que odio yo los estereotipos y he pecado de ello. No se puede juzgar a nadie sin conocer, desde luego).

    Tengo frio y Mikel se percata de ello porque me pone su jersey en los hombros y me abraza. Me paro en seco y le separo de mí. Me mira tan asombrado cuando me pongo su jersey que me dice: “Jo, Rizos…me encanta tu naturalidad. Cualquier tía no se lo pondría en mitad de la calle. Y, por cierto, parece que te queda como un vestido, jajajaja”. Abro mis brazos y me doy una vuela sobre mí misma para que vea que soy experta en perder el glamour en cualquier sitio pero no la sonrisa. “Ande yo caliente, ríase la gente!!, le digo mientras doy unos saltitos. “uhmmm…acepto ese reto. Prometo calentarte esta noche”, me susurra mientras nos fundimos en un beso.

    “Solo esta noche??”, murmuró a la vez que me muerdo el labio

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    Espero que os vaya gustando y me dejéis algún comentario.

    Gracias por leerme!

    La Científica Empedernida

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    Cuttlefish
    Invitado
    Cuttlefish on #358097

    OHHh por favor, que siga!!! Está muy interesante!!! ¿Quién es Lucía??

    Responder
    I.
    Invitado
    I. on #358512

    Que si nos ha gustado?? Pues claro!! Qué interesante se pone esta historia… quién será Lucía??
    Ayy Científica! Que nos tienes enganchadas a esta historia y yo no quiero que se termine :(

    Responder
    anaGR
    Invitado
    anaGR on #358820

    Estoy totalmente de acuerdo con I. No quiero que se acabe pero… escribirás más, Científica Empedernida?

    Responder
    SAN
    Invitado
    SAN on #360935

    ¿Habrá segunda parte pronto? =)

    Responder
    Bea
    Invitado
    Bea on #361176

    Loversizes, ¿por qué no avisais de que hay nuevo capítulo? No he visto ningún post en Facebook

    Científica, siempre nos dejas con la miel en los labios. Queremos más

    Responder
    Científica emperdernida
    Invitado
    Científica emperdernida on #364159

    Chicas, siento estar tardando mucho en publicar el final pero me he hecho un esguince en la muñeca y no puedo escribir mucho. sorry!

    Responder
    I.
    Invitado
    I. on #364225

    Ohh… lo primero eres tú, así que tranquila, esperaremos lo que haga falta para conocer el desenlace.
    Además, así tienes tiempo para ir pensando el próximo relato ;)
    Un abrazo!!

    Responder
    Ana GR
    Invitado
    Ana GR on #364559

    Halaaaaaa…qué dices?? Qué mala suerte, recuperate pronto porque nos tienes en ascuas

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