Hola, antes que nada, perdón por la parrafada que voy a soltar, espero que alguien lo lea y me podáis ayudar.
Soy un chico de 30 años, y la verdad que siempre he sido bastante tímido y poco lanzado. En mi vida me han gustado pocas chicas, solamente he tenido una relación de unos 4 años, y al resto de chicas o no me he atrevido a decirles nada, o cuando he reunido fuerzas para decírselo, me han rechazado. Quizás eso hace que sea todavía más cauto a la hora de decírselo.
El caso es que tengo una amiga que, aunque conozco desde el instituto, es solo desde hace un par de años que somos inseparables. Lo hacemos prácticamente todo juntos, y nunca la había visto con estos ojos hasta hace poco. Ella siempre ha sido muy reservada en cuanto a las personas con las que ha salido/tenido algún rollo, no nos ha contado nada al resto de amigos, así que en ese aspecto siento que la conozco poco.
Cuando hemos ido de viaje o de concierto hemos dormido juntos e incluso bromeábamos sobre vivir juntos. Pero este año mi visión hacia ella ha cambiado. La quiero como amiga por encima de todo, por supuesto, y no me gustaría perderla.
Pues a principios de este año empecé a plantearme lo que sentía hacia ella. Empecé a verla como lo que yo en mi mente era un «amor más adulto», de dos personas que se entienden, se quieren, y harían todo lo mejor el uno por el otro. Era difícil imaginármela como una compañera sexual, sería raro…
Fuimos a nuestro primer concierto solos, sin más amigos, y creo que fue ahí, durante ese fin de semana, solo con ella, donde por mi mente pasó la posibilidad de estar sintiendo algo más.
Después hicimos otro viaje con más amigos y en este caso a ella «le tocó» dormir con otro amigo (que a su vez también siente algo por ella). Ella no dijo nada y creo que fue ahí, y durante esa semana, donde vi cuánto me importaba. Es como que sentí celos por ella, por primera vez, y me di cuenta de que amor adulto una mierda, también tiene mucha parte de ese amor adolescente, inseguro y visceral. Ya no le bromeo sobre vivir juntos, no bromeo llamándola «cari» como antes, porque para mí ya no sería una broma.
Poco después de eso, vino el confinamiento y volvíamos a hacer de todo juntos (eso sí, online). Y ahora desde que se puede salir a dar paseos, nos hemos visto el 99% de los días, unas veces saliendo juntos, otras incluso yendo bajo su balcón (muy Romeo y Julieta, sí), cosa que me raya todavía más. Me encantaría poder robarle un beso un día, y ahora me pongo a mí mismo la excusa de la mascarilla, pero tampoco sé si me atrevería. El caso es que unos días la veo receptiva, otros no, unos días me pienso que quiere algo más, otros que solo amistad. Y sinceramente, me estoy volviendo loco, me está afectando mucho hasta el punto de sentirme fatal y no querer salir a la calle a verla, porque no sé lo que me voy a encontrar.
Necesito salir de esta situación cuanto antes, sin perderla como amiga, y a poder ser junto a ella, claro…
Siento mucho que se haya hecho tan largo, menos mal que es domingo y tendréis más tiempo libre…