La odontopediatría es una rama de la odontología que se encarga de estudiar y tratar a bebés y niños. Es más, podríamos decir que la odontopediatría comienza antes de que el bebé nazca, ya que es muy importante ofrecer a los padres la información necesaria para que inculquen una correcta higiene bucodental y hábitos saludables a su bebé. Buscar un dentista para niños es una tarea obligatoria que tenemos todos los padres, ya que con exploraciones tempranas podemos detectar malformaciones o problemas que se pueden solucionar a tiempo.
En esta rama de la odontología se trabaja muchísimo la prevención, donde los especialistas serán los maestros encargados de enseñar hábitos saludables tanto de higiene como de alimentación a los peques de la casa. Nuestros hijos son lo más importante para nosotros y queremos lo mejor para ellos, y en este caso lo mejor es un odontopediatra especializado. En este artículo descubriremos los aspectos claves en los que poner el foco a la hora de elegir un buen dentista infantil.
Qué debemos tener en cuenta al escoger un dentista para niños
Seguramente lo primero que hagamos sea entrar en internet a investigar qué clínicas abarcan estas edades que nos interesan. Seguro que nos salen muchas, pero nuestra primera criba debe ser la especialización. Siempre nos dará mejores garantías alguien que se ha formado especialmente en ese campo y está acostumbrado a tratar bebés y niños.
Otra de las cosas que hay que tener en cuenta son las referencias. ¿Qué dicen otros pacientes? ¿cómo ha sido su experiencia? Si la clínica cuenta con expertos y además sus pacientes hablan bien de ella, ya tenemos dos motivos importantísimos para tener una primera toma de contacto. Un claro ejemplo de clínica especializada y reputada es la Clínica Puyuelo de Barcelona. Su equipo de profesionales expertos, su trato exquisito, calidad, empatía y sus pacientes satisfechos la convierten en una clínica de referencia en Barcelona.
Una vez dado el primer paso y tomado el primer contacto tenemos que ser observadores y saber valorar después de nuestra experiencia si estamos en el lugar adecuado. Para ello, cómo se han comportado con nuestro hijo será fundamental a la hora de tomar decisiones.
Cómo escoger un buen odontopedriatra
Un odontopediatra tiene que estar hecho de una pasta especial. Tratar con niños en estas situaciones no es tarea fácil, por lo que el profesional en cuestión tiene que ser una persona dedicada con los peques, empático, amable y muy paciente. De entrada, los niños pueden sentir miedo a lo desconocido, a los aparatos que ven en la clínica, los uniformes, etc. Un buen dentista infantil tiene que saber lidiar con el llanto, el miedo y todas las emociones que un niño puede exteriorizar en consulta. Debe conseguir que el pequeño sienta que es un lugar seguro, donde es posible combinar medicina, juego y alegría en un mismo espacio.
Al final lo único que queremos los padres es que traten a nuestros hijos como lo haríamos nosotros. Que los cuiden, que los mimen y entiendan, logrando que ir al dentista sea algo positivo.
