Tengo 40 años y he tenido tres relaciones importantes en mi vida. Las tres han terminado porque nunca he sido suficiente:
– En la primera, A tuvo que decidir entre seguir conmigo o empezar una relación con la que hasta entonces había sido su mejor amiga. Y optó por la amiga.
– En la segunda, M me dijo al poco de conocernos que no le gustaba lo suficiente para tener una relación seria. Yo seguí intentándolo durante más de un año, saliendo con él sin compromiso, “sin esperar nada” (ja), pero tampoco cambió de opinión. Cuando después de meses de vernos le planteé que o consolidábamos lo que teníamos o dejábamos de vernos, prefirió que nos dejásemos de ver.
– Y en la tercera, mi relación más sana con diferencia, P dice que sí, que le gusto mucho, pero hay unos pequeños contratiempos que harían nuestra relación un poco complicada al principio y no está dispuesto a pasar por ello. También prefiere que dejemos de vernos.
Arrastro problemas de autoestima desde pequeña que llevo más de 4 años tratando en terapia, y siento que he avanzado mucho, pero la imposibilidad de encontrar pareja me hunde. Creo que me voy a quedar sola toda la vida, que nunca nadie va a estar dispuesto a apostar por mí, y no puedo con la pena tan grande que me da pensar que va a ser así.