Llevaba siglos queriendo probar un secador iónico, y de hecho otra de las colaboradoras probó uno que estaba genial pero se me iba un poco de presupuesto ya que costaba 170€.

Yo buscaba algo más asequible, y a poder ser que fuera útil para poder llevar en la maleta de viaje. Y en uno de mis pedidos a Prozis encontré esto.

¿Qué tiene de especial?

Pues bien, los secadores iónicos se han popularizado porque dañan menos el pelo. No abren la cutícula y además ayudan a controlar el frizz (algo que si como yo vives en la costa, agradecerás horrores). Los señores de la marca recomiendan secar el 80% del pelo con el modo calentito, y el 20% restante con el modo fresco para proteger aún más tu pelo.

¿Qué es lo que me ha gustado a mi?

Pesa poco, muy poco, y encima tiene una forma que además de bonita es ergonómica a la hora de usarlo y facilita el secado. Se puede doblar casi por completo y cabe en cualquier maleta.

El diseño es precioso, que no es lo más importante, pero es que es llamativo de lo bonito que es. Los colores que tiene y los acabados. Otro detalle es que trae una bolsa muy mona de terciopelo para tenerlo siempre protegido y bien guardado.

De potencia tiene 1200W, y para mí, suficiente la verdad. Es cierto que no notas la misma potencia loca que tiene el secador de mi hermana que es profesional, pero aquí viene lo bueno. Con el profesional si lo acercas al pelo se seca en un minuto pero sale humo porque lo quema. Mientras que este secador iónico lo puedes dejar sobre el mismo mechón un buen rato que notas perfectamente que mantiene el pelo intacto y no lo quema.

 

El secador cuesta 49,99€ que ya de por si está genial de precio, pero con el código de las chicas de WeLoversize tienes un 10% y te ahorras 5 euritos.

 

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