En Amazon hay como jaulas con candado para guardar la comida en el frigo y los estantes. Que si no atiende a razones cuando vea que no puede gorronear se buscará la vida
Compañeras de piso que se te comen la comida y no lo niegan
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AutorEntradas
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PeluchitaInvitadoLauInvitado
Sólo vengo a decirte que te acompaño en el sentimiento porque a mí también me ha pasado y en dos pisos diferentes.
Como en tu caso, la primera fue una chica que metieron de rebote porque la anterior se fue en el último momento y yo como subarrendataria sólo podía tragar los tres meses que me quedaban. La chica era simpática, íbamos juntas a la compra y mientras ella compraba patatas fritas y chocolate, yo me gastaba ese mismo dinero en fruta. Ella lo notó y me dijo que no entendía cómo podía hacerlo. Más tarde me mandó un audio mientras se comía una de mis naranjas, avisándome. Me puse como loca y ella me dijo que era sólo comida… De eso pasó a meterse en mi habitación para acceder al balcón porque según ella «era del piso y no mío». De día y de noche, mientras yo dormía. Ahora suena muy surrealista y lo triste es que no pude hacer nada, el casero me decía que eran cosas de convivencia que teníamos que arreglar entre nosotras.
Después fue una amiga que salía con uno de los compañeros de piso. Un día cenando con mi novio él chico le dijo a ella «¿te han enviado queso desde España?» y ella dijo que no, que una amiga se lo había regalado. Yo pensé que ese queso se parecía mucho a una de las dos cuñas que me había traído mi familia hacía dos días. Cuando fui a cogerlas, faltaba una. Se había zampado la mitad en dos días y por lo visto pensó que ya no valía la pena ni volverla a dejar en su sitio y se la puso en su leja de la nevera. Hablé con ella y se hacía la loca y luego llegó el jamón, los huevos… Me tuve que poner seria, la amistad se enfrió muchísimo y las cosas que no necesitaban nevera, directamente en mi cuarto.
Según mi experiencia son caraduras y ya está. Una vez puede pasar pero si habláis y lo vuelve a hacer, es que le importa una mierda lo que pienses. Si podéis, echadla cuanto antes y si no, paciencia y quizás una neverita portátil en tu habitación (?). Mucha suerte, en su momento yo me sentía muy impotente y más de una vez pensé en echarle algo chungo a la comida pero ahora me meo de risa acordándome de aquellos tiempos.LulúInvitadoMarisolInvitadoVarios puntos.
-A la chica del post:
Te entiendo completamente y es que debe darte una rabia de que le da igual todo,
Yo me planteaba echarla.
No cumple con los requisitos de convivencia.
Además con el covid hay que tener cuidado porque fíjate si tiene un día covid , le da igual y toda tu comida.
De verdad , esta chica no esta bien pero no sois quién para curar sus problemas.
-A las maestras de ortografía.
Te lo dice una disléxica , a mi a día de hoy me sigue costando mucho distinguir entre haber con h y a ver sin h.
Y esa algo que a mi me frustra.
No sé si a ella le pasa igual que a mi pero a mi ciertas normas de ortografía me cuesta mucho así que por favor no juzguéis tan a la ligeraMiriamInvitadoKate KInvitadoHay compañeras de piso que son de lo peor. Una mía se equivocaba también con la nevera y el congelador. Una vez me tiro toda mi comida del congelador alegando que estaba estropeada tras un corte de luz de una hora…medicina está estudiando la chavala.
AngieInvitadoAnónimaInvitadoYo he tenido de todo en mis años de convivencia estudiantil y no tan estudiantil. Tuve un compañero que era un cerdo y no lavaba platos y encima los usaba de cenicero tras acabar de comer, cogimos un viernes (se fue el finde fuera) mi otra compañera y yo y le metimos todos los (sus) platos sucios y con sus tropezones y cenizas en su cuarto cuando volvió del fin de semana su cuarto olía a perros muertos. Ya lavaba un poco más a menudo.
Y gorrón era como sí sólo, nos cogía comida a ambas, nos agenciamos el número de la madre que vino al piso a dejarle algo y al contarle la movida se ofreció a pagarnos al mes lo que nos cogiera y descontárselo de su «paga». Y si metía comida en nuestros estantes o armarios iban o a la basura o en una bolsa y al banco de alimentos.
Y este año una compañera se comió la tarta de cumpleaños que le hice a mi pareja porque tenía estrés y le dio antojo de algo dulce, y tenemos un súper a 2 minutos, me cagué en sus muertos, lógicamente.Si por las buenas no espabila, hablad con el casero, le explicas lo que hay y que no la queréis ahí porque no os sentís seguras o maletas y a la puta calle si no figura en el contrato.
Suerte con ello!
MaríaInvitado -
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