Hola Sam. Te cuento un poco mi historia con este tema. Hace unos años, mientras estudiaba Psicología, empecé a sentir un bajón importante. Lo achaque al exceso de estrés, tanto por la carrera como por problemas personales. Llegó un momento en que apenas podía levantarme de la cama, y cuando lo conseguía era para ir al sofá. No podía estudiar, era incapaz de concentrarme. Estaba agotada, incapacitada y terriblemente triste y vacía. Creía que era depresión, y seguramente lo era. Pero al fin, con meses de retraso, se me diagnosticó hipotiroidismo. Con la medicación poco a poco empecé a mejorar. Pero el tema me marcó tanto que decidí hacer mi trabajo de fin de grado sobre la relación entre depresión, ansiedad y trastornos de la Tiroides. Si te interesa el tema te lo puedo pasar por email (no se si tu puedes acceder a mi email desde aquí o mandarme algún tipo de mensaje privado, pero seguramente las chicas de weloversize te lo podrían dar ya que tengo que ponerlo para poder dejar el comentario, y por si acaso miraré las respuestas a este tema los próximos días por si dejas alguna respuesta al respecto). En cualquier caso, si estás con el ánimo bajo ahora mismo entiendo que no tengas ganas.
A modo de resumen, lo que pude sacar en claro fue que los trastornos del ánimo y los de la Tiroides están íntimamente relacionados. Tanto, que la medicina y la psicología no se aclaran en que causa que, ni en quien tiene que tratarlo. La ciencia actual sigue intentando separar cuerpo y mente como si no fueran la misma cosa. La realidad es que la Tiroides forma parte de la respuesta al estrés, así que hay quien teoriza que una respuesta demasiado fuerte y mantenida en el tiempo al estrés (ansiedad) puede agotarla y causar hipotiroidismo. La realidad es que un hipotiroidismo (que puede llegar por causas exclusivamente médicas) también puede provocarte una depresión. Y que tu Tiroides este en tratamiento no significa que tu mente ya no lo necesite. La medicación te mejorará, claro, porque el círculo que mantenía tu depresión deja de alimentarse de que tu cuerpo no funcione al 100%. Pero es un círculo, y si tus pensamientos negativos, vengan de donde vengan, siguen alimentandolo, seguirá girando.
La idea, aunque parezca mentira, no es darte la brasa. Creo que entender lo que nos ocurre es importante para enfrentarnos a ello. A mí al menos, me ayudó. Sólo quiero que sepas que entiendo lo que te pasa y como te sientes, y lo frustrante que es que los médicos te digan que estás bien cuando tu sabes que no lo estás. Simplemente a veces intentamos curar la mente con la medicina del cuerpo, y en esos casos subir la dosis no hará que mejoremos.