Hace meses conocí a una persona en el trabajo. En un principio me sentí atraída hacia ella, pero después noté que simplemente quería una amistad. Ella era la típica chica pija y atractiva, pero muy maja y risueña. Fuimos haciendo migas hasta hablar casi todos los días por whatssap o redes sociales. Pensaba que éramos amigas…
Algún día ella me ofrecía quedar, pero justo cuando se acercaba el día inventaba una excusa. Yo nunca le decía de quedar, de hecho.
Yo obviamente me comencé a sentir mal porque ella hacía eso, pero pensé que quizá era una coincidencia. Pasó el tiempo, hasta que comenzó a afectarme personalmente y mucho. Yo siempre he tenido pocos amigos, pero buenos, y muchas veces siento que mi personalidad no pega mucho o no suele agradar (aunque soy graciosa y simpática. Es muy raro.). Un día me canceló minutos antes de quedar y me quedé vestida y todo.
Finalmente marchó del trabajo y me dijo, de nuevo, que quedáramos algún día. Yo le dije que cuando volviera de un viaje6lo haríamos. Volví, le dije que quedáramos, aceptó y, de hecho, me dijo que iríamos a dar una vuelta en su coche… Como ya deducís, nunca volví a saber de ella. Nunca me volvió a escribir ni nada.
Un día pasó por el trabajo y me dijo, una vez más, que pronto me escribiría para quedar. Me volví a ilusionar porque en serio que nos llevábamos bien y nos reíamos mucho. Como otra vez deducís, nunca me escribió.
Nunca entenderé porque me ofrecía quedar y luego no quería. Yo soy una gran persona y amiga, como también una persona que se preocupa por otros y que tiene sus problemas.
En fin, esto me ha afectado muchísimo y fue hace meses. Siento que mi personalidad tiene un defecto o que la gente nueva en verdad no quiere quedar conmigo ni conocerme. Puede que esa no sea la realidad, pero así es como me siento.