No sé muy bien porqué me ha dado por escribir hoy aquí… Supongo que para desahogarme o quién sabe. Quizás, en el fondo busque algo de comprensión.
Hace un año mi ex pareja recogió sus cosas después de 4 años y salió de casa para marcharse a hacer su vida en otra parte. No terminamos mal la verdad, simplemente comprendimos que para ser dos desconocidos que duermen en la misma cama era mejor darnos un último abrazo y ser lo que somos en realidad. Amigos.
Mentiría si dijera que no lo pasé mal, porque aunque ya no hubiera esa chispa del principio no es lo mismo llegar a casa del trabajo y que haya alguien a que te reciba la luz del pasillo porque ya no está la otra persona para apagarla cuando te despistas. Pero no fue tan terrible como creía, a las pocas semanas ya podía hablar con él sin sentirme mal, y me di cuenta… De que realmente mi vida era la misma.
A los pocos meses, comencé algo con un compañero de trabajo. Todo comenzó con una cerveza después de la jornada y poco a poco fue surgiendo algo más que esa cordialidad entre compañeros.
Estuvimos juntos cinco meses, terminando la relación el pasado mes de enero. Momento en el que pidió una excedencia para irse ese tiempo con su padre(su madre había fallecido).
El problema vino cuando supe que estaba embarazada. Después del momento de shock y de contar blisters vacíos de la píldora una y otra vez por si me había saltado algún día, y de que el médico me lo confirmara… Lo asumí. Iba a tener un bebé.
Llamé a este hombre para contárselo, no para volver con él, los dos teníamos claro que lo nuestro no era algo a largo plazo pero creí que tenía derecho a saberlo. Me dijo que no sabía si era suyo, pero que era problema mío y me colgó.
¿Me dolió? Sí, sobre todo porque no entendía como podía decir algo tan horrible… Y porque me daba pena que el peque no conociera a su padre.
Ahora viene el motivo por el cual os he contado mi vida y milagros.
Después de eso me habló mi ex para saber como estaba y le conté todo. Estuvo conmigo antes del confinamiento y una vez se decretó el Estado de Alarma me lo encontré en mi puerta con una maleta y comida para llevar. Diciendo que no me dejaría pasar tanto tiempo sola y embarazada, porque estaba seguro que serían más de dos semanas de encierro.
Ha estado en mi casa desde entonces, durmiendo en la habitación vacía que me sirve de despacho ahora que estoy teletrabajando. Él bajaba a la compra hasta hace poquito que empezamos a ir los dos y se sabe mejor lo que debo tomar y hacer que yo misma que devoro todos los libros sobre embarazo y niños que encuentro.
Como hoy se abrían fronteras le dije el jueves de nuevo, porque con cada cambio de fase se lo repetía, que lo peor había pasado de momento y que podía volver a su casa si quería.
Pero me ha dicho que estando de siete meses y medio no debería quedarme sola. Y que planeaba quedarse hasta el parto.
Hoy se lo he vuelto a decir y me ha dicho que quería proponerme algo, volver a intentarlo. Que él reconocería a la niña como suya y que podríamos ser una familia… Que se había dado cuenta en estos meses de que podríamos funcionar juntos.
Como no sabía que contestarle, me ha dado un pico y se ha ido a su casa para recoger algo de ropa y asegurarse de que todo estaba bien por ahí.
Y yo estoy aquí, en mitad de la cama muerta de calor, comiendo pepinillos agridulces con miel(saben mejor de lo que suena, se ha convertido en mi plato favorito) y hecha un lío.
Le quiero, eso es indiscutible. Me gusta como me abraza cuando estamos viendo una película o como apoya su barbilla en mi hombro cuando cocino y quiere meterse con mis antojos.
Me gusta, cuando apoya las manos en mi tripa y le habla a la niña de lo loca que estoy y de que cuando crezca será ninja o la mejor futbolista del mundo.
Y es indiscutible que me gusta tenerle por casa… Pero no sé si estoy enamorada.
Además, ya fracasamos una vez ¿Y si ocurre otra vez? ¿Como protejo de eso a mi hija? ¿Como la protejo del dolor de ver irse a alguien que es importante en tu vida? ¿Y como le protejo a él de una vida que no es la suya? Debería… Estar conociendo gente, creando su propia familia, no a mi lado obligado porque a mi me fallaran las pastillas y él por algún motivo se siente responsable de mi.
Sinceramente no sé qué hacer.