Soy fiel lectora de vuestro blog, pero mi chico, Juan, mucho más. Realmente él me recomendó que os leyera… y hoy me he decidido a contaros mi/nuestra historia..
Yo había salido de una realción de varios años de novios y unos cuantos casados, con una separación de por medio, y una niña con un añito, con la autoestima por lo suelos y sin tiempo ni ganas para rehacer mi vida. Había estado como un año «corriendo alrededor de la mesa» (liberalmente…) detrás de mi marido para que me tocara. Y al final me cansé y decidí que yo debía quererme más de lo que le quería a él. Y no era por mi físico… tenía menos de 30 años y un cuerpecito precioso.
Los siguientes 5 años fue una locura; aprovechaba cuando no tenía a mi niña para quedar con chicos a través de aplicaciones tipo meetic, tinder..; a veces era una locura y quedaba con dos el sábado y dos el domingo. Sí, un auténtico zorrón. Ahora, con todo lo que se y con lo que veo en las noticias, pienso que demasiada suerte tuve, porque encontré a chicos sanos y sencillos en su mayoría. Pero oye, el gusto me lo llevé yo, y el subidón de autoestima también.
Hasta que una vez ví un chico súper normal, era uno de esos chicos que te cruzas por la calle, pero ví algo en él.. en sus ojos.. que me hizo “darle un toque”. Un papi separado también con un niño. Y empezamos a hablar. Él no pasaba por un buen momento (sin trabajo, en vías de perder a su hijo, sin apenas recursos económicos, lejos de su familia…) pero aún y así quedamos, tomamos un café y a mi me despertó curiosidad. Siempre recordaré ese café aquella tarde. Qué cortaditos estábamos los dos!
Y llegó el momento de la segunda cita. Quedamos en su piso, me dio un primer beso super extraño (deciros que fue un pico y en décimas de segundo me seguía hablando como si no hubiera pasado nada jajaja) y ese finde ya dormí con él.
Y os tengo que decir que fue en ese momento cuando lo sentí. Estábamos juntos (ya me entendendeis..) y le solté un “tú eres una mitad”. Se quedó muerto. Supongo que le parecí una loca, pero yo sentí que él era una parte para mí.
Desde entonces, después de una separación física a las pocas semanas de más de 1.000 kms, después de sus dudas por iniciar algo a distancia, después de la pérdida de personas muy queridas para él.. apostó por mi, y en 2 semanas hizo entrevista vía Skype para un puesto de trabajo en Barcelona, y aposté por él! Después de vivir sola durante 5 años con mi hija y que ella no conociera a nadie, a pesar de sólo conocerlo de 3 meses, se vino a vivir con nosotras.
Hoy en día vivimos felices, luchando por nuestra familia, ya son 6 años juntos, mi hija le adora y él nos cuida como si fuéramos su propia piel, ha ascendido en su trabajo, vamos a ver a su familia como mínimo 2 veces al año y yo soy tremendamente feliz.
Y en cuanto al sexo.. os diré que peso como 25 kilos más que antes, pero él me adora, venera mi cuerpo, me dice que yo estoy preciosa y que soy preciosa y lo que es más importante, me lo demuestra. Esa felicidad que no tuve con 30, la tengo ahora con 40.
Gracias Juan, por estar en mi camino, y por ser para mí <3