Chicas, vengo a pedir consejo y a desahogarme porque ya lo de anoche fue el colmo de los colmos; y eso, pues lo que dice el título… creo que el hacerme mayor, está haciendo mella en mi paciencia.
Quizás me extienda, pero si no lo hago igual no me entendéis.
Bueno, el tema es que mi mejor amiga y yo tenemos una amistad de más de 20 años. Nos conocimos de peques y se ha convertido en más que mi amiga, una hermana.
Tenemos mil vivencias juntas, anécdotas,.en fín, eso, más de 20 años que se dice pronto.
Ella es… bueno, vamos a llamarla hippie/despreocupada en la vida diaria. Es una persona algo vaguilla con la limpieza y esas cosas… y yo, pues todo lo contrario.
En verdad, somos como la noche y el día, pero bueno.
Está casada. Mi cuñi, como yo llamo a su marido, es un tío del 10. Algo cabezota pero se lo perdono porque conmigo de verdad, no se puede portar mejor.
No tiene niños (y creo que no tendrá) y eso ha hecho que yo tenga un pequeño espacio en su casa.
Me quedo allí habitualmente y bueno, nos lo pasamos bien.
Pero en estos últimos meses la cosa ha cambiado de forma brutal.
Ella de por sí, es muy egoísta y tiene mucha cara dura, sobretodo para tema comida. Intenta siempre aportar lo menos posible, y a la hora de pagar la parte de la cuenta que le toca, siempre es la que menos paga. He sabido llevarla porque, ya después de tanto tiempo, «uno sabe el andar de la perrita» (un refrán muy nuestro), pero es que últimamente está que salta a la mínima y yo ya… buf!! Me cuesta aguantarme.
En estos días, nuestro grupito de amigas (somos 4), nos hemos venido a pasar unos días de vacaciones.
Para abaratar, hemos traído cada una pues una pequeña compra. Nos hemos puesto de acuerdo para no repetir y así compartirlo todo.
En fín, que yo dije que una de las noches cenaríamos mexicano y que yo me encargaba de llevar lo necesario.
Ella dijo que llebaría bacon para mezclar con las tiras de pollo, porque no le gusta lo que viene siendo el tema pimientos y de más.
Hasta ahí todo genial.
Pues llegó la noche y se hizo tal cuál. Mesa preparada , todo listo y nos sentamos a cenar.
Yo había tenido ardor de estómago todo el día, así que pensé en no comer picante y ponerme un poquito de bacon y pollo en la fajita. Pues… tachán!! Cuando fuí a coger la mezcla me dice: ¿Qué haces? ¡Eso es mío! Y su gesto característico de cuando se enfada.
Sólo le dije:¿Pero la comida tiene exclusividad?
No volví a decir nada en toda la cena y en cuantito terminamos y limpiamos, me fuí a la cama.
A ver, que entiendo que ella solo coma de eso, pero juradito que lo que había en el plato daba para unas 5 fajitas. Y que si yo no hubiese tenido ardor de estómago tampoco lo hubiera tocado.
Igualmente, ella, lleva todos estos días comiendo de todo lo que hemos traído las demás, de su parte no se ha tocado nada. Es más, hoy nos vamos y ella ya recogio anoche lo que trajo y ya lo guardó.
En fín, así es siempre y yo ya, rebosé el vaso anoche y no sé que hacer. Estoy súper enfadada. Hasta ganas de llorar tengo. No me apetece ni hablarle, pero luego me da pena tirar más de 20 años de amistad…
Y hablar con ella? Lo he hecho miles de veces; es una persona que no atiende a razones. Es cabezota, mucho.
Por mi parte tengo que decir que también soy cabezona, que me quejo mucho de todo porque soy una tiquismiquis, y que si sé que si tengo razón en algo voy hasta el final. Eso sí, si me equivoco, lo reconozco sin problema y pido perdón.
Por favor, ilumínenme porque esto me afecta y ya no sé muy bien como gestionarlo :»(
Gracias mis chicas, y perdón por el tostón.