¡Hola!
Supongo que por un problema así podría haber buscado en Google, Enfemenino, etc (seguro que hay mil posts sobre eso), pero quería preguntarlo por aquí porqué… no sé, sois más comprensivos todos, supongo.
El caso es que yo nunca he sido de tener granos en la espalda. En mis tiempos de adolescente sufrí de acné como todos (aunque tampoco exagerado) y tras cumplir los 21 el pasado septiembre me volvió a aparecer un poco en la cara, pero no le di mucha importancia, quizás mi cuerpo se está depurando de tanta hormona y antidepresivo que tomo y por eso me salieron granitos en la cara (también supongo que por la llegada del otoño, pues ahora ya tengo menos).
Pero en fin. Que desde hace meses tengo la espalda LLENA de granos, pero LLENÍSIMA. Algunos con costras, algunos con pus… Siento ser desagradable, pero al pan pan y al vino vino. Me pica muchísimo y cada vez tengo más… Cuando estoy en la ducha intento echarme toda el agua posible para exfoliar, aunque a la hora de echarme jabón tampoco llego apenas a tocármela (entre mi copa F y mis brazos cortos…) así que no puedo frotar.
Hoy se lo he enseñado a mis padres para ver que podía hacer y me han dicho que vaya al médico. Pero mi madre ya ha sacado conclusiones y me ha mirado con esa cara que ponen las madres criticonas de «ya sabes lo que te dirá…» o sea, que tengo granos en la espalda porque estoy gorda. Me pregunto qué tendrá que ver una cosa con la otra, llevo varios años estando gorda y nunca había tenido. Igual como mi novio, que nunca ha estado gordo, tuvo bastantes hasta hace poco.
Tengo miedo de ir al médico y que tengan los santos cojones de decirme que si tengo granos debo perder peso (si habéis leído mi artículo en el cual los médicos me desatendieron varias veces por estar gorda entenderéis mi reticencia). Pues eso. Necesito soluciones, consejos, productos… Todo lo que se os ocurra, porque llega el verano y ya tengo bastantes complejos a superar como para encima tener que ir por la calle sabiendo que me mirarán la espalda con asco.
-Lily
PD: Lo siento, no sé ser breve.