Pues nunca pensé que iba yo a escribir aquí en el foro. Siempre os leo pero estoy en una situación que ya se está descontrolando.
Mi ex y yo estuvimos juntos dos veces hace unos seis años, y a día de hoy nos seguimos viendo. Más delito tiene que vivimos a 600 kilómetros de distancia.
Tuvimos una relación entre idílica y problemática, por difícil que sea de entender. El mayor problema es que él nunca me ayudó a confiar en él y cuando nos conocimos él tenía pareja. Tras una semana, le dije que o dejaba a su pareja o no volveríamos a vernos. Y así lo hizo. Pero nunca pude confiar en él porque me preguntaba a mí misma si a mí sería capaz de hacerme lo mismo.
Nos llevábamos muy bien y nos reíamos mucho junto, salvo esos momentos de desconfianza que asomaban. Me enamoré como nunca lo había hecho a mis 30 años. Y la cama era espectacular, para qué negarlo.
Y así dos veces, la primera vez me dejó el cansado de mi desconfianza y la segunda le dejé yo por otra bronca. Y siempre me dijo que él y yo estábamos destinados a estar juntos, y que en algún momento de nuestras vidas volveríamos a estarlo.
Al poco tiempo conocí a un chico del que creo enamorarme, y el primer año fue…bah…bien podríamos decir. Pero lo ex nunca salió de mi cabeza, y yo de la suya tampoco a la vista de la historia, porque durante seis años, hemos quedado una media de una vez por año. (Él también conoció a alguien)
Me estoy extendiendo de más. Al lío. Los tres últimos años con mi ex han sido un horror, y la cuarentena lo dinamitó todo, encima mi ex me escribía día sí y día también preguntándome solamente cómo estaba. Y respetando si no le contestaba, porque daba por hecho que no estaba sola y no podía. Al día siguiente recibía otro mensaje. Y al otro.
Hemos vuelto a vernos tras la cuarentena, y en estas vacaciones que ya han empezado nos volveremos a ver. Y cuando nos vemos hacemos vida de pareja y tenemos el mismo trato que antes. Yo he decidido que voy a terminar mi relación, pero no por él, sino porque no aguanto más, y tampoco sé ni si yo querría o él querría tener algo más, porque saldría mal.
Sé (de sobra) que está mal lo que hacemos pero no puedo evitarlo. No me juzguéis e intentad entenderme, por favor.
¿Os ha pasado algo parecido? ¿Cómo lo habéis gestionado?