Hola,primero de todo, la solución a un problema de conducta no es «sacrificarlo», la eutanasia se debe reservar a problemas de salud graves dónde el animal sufre y no tiene solución posible.
Por otro lado, si el animal en diez años no ha tenido problemas de conducta, no es un animal agresivo, lo que le pasa le pasa por algo, no sabe hablar, quizás antes de morder comunique que no está bien con la situación que se está produciendo pero no lo sepáis «leer». Como te han dicho comentarios anteriores busca ayuda profesional, veterinario para descartar patología física y una vez descartado, busca un etólogo ( no adiestrador) que os ayude a identificar y a poner solución al problema.
Uno de mis perros tiene casi trece años y siempre ha sido un santo, hace dos empezó a comportarse de manera extraña, problemas para dormir, ansiedad «injustificada», hasta que empezó a tolerar mal las manipulaciones (no muerde pero empezó a gruñir dependiendo cómo lo tocaras y quién), pues bien, después de buscar todas las causas posibles de dolor, de problemas hormonales, etc. Nos derivaron a una veterinaria especialista en etología que es una crack, en una consulta teníamos arreglado el problema, resulta que tiene deterioro cognitivo asociado a la edad, nos recetó medicación para dormir y para que estuviera más relajado, y nos dio pautas para la vida diaria ( alejarlo de situaciones de estrés, no cambiarle demasiado las rutinas, cederle un espacio en casa «tranquilo y seguro» para cuando necesitara estar fuera del bullicio de visitas y cosas muy simples, que han hecho que vivamos perfectamente, sin ningún altercado). Además ella en 5 minutos nos enseñó todos los avisos en lenguaje canino que él hacía antes de pasar a gruñir, sólo que como humanos no lo entendíamos.
Desde entonces cero problemas, todos felices, él pasa sus visitas de rutina , está como un roble, y con su medicación está estupendo.
Los animales también envejecen y también se merecen que los cuidemos hasta el final como uno más de la familia, porque por lo menos para mí, mis dos perros son parte de mi «núcleo duro». Ánimo y ya verás como tiene solución.