Buenos días, vengo a desahogarme con esta magnífica comunidad.
Soy maestra interina, es mi primer curso y en noviembre me adjudicaron una sustitución hasta abril. Yo estaba como loca de contenta porque llevaba desde la primera semana a colegio por semana.
Antes de ir al tema principal,me gustaría aclarar que, aunque lo poquisimo que tenemos lo hemos conseguido con nuestro esfuerzo, no tengo nada en contra de las personas que lo han tenido todo muy fácil, que sus familias se han podido permitir regalarles pisos, coches y formación privada. Cada uno con sus circunstancias, pero pienso que eso no les hace ser más que yo (ni que nadie, por supuesto); y también quiero aclarar que soy bastante roja (mi entorno bromea con que dejo a Podemos muy a la derecha).
El problema viene cuando, en mi primer día se cole, acudo a la sala de profesores a presentarme y a conocer a mis compañeros, y me están hablando de cosas políticas estilo «es que estos rojos solo quieren vivir de ayudas» y demás. Ya empecé a mosquearme, pero como no quería empezar con mal pie, no dije nada.
A lo largo de los días van surgiendo conversaciones típicas entre compañeros, y yo hablo con toda naturalidad de mi piso de 80 metros cuadrados y terraza hipotecado a 40 años, o de mi coche Opel de 15000 que pago a plazos, y me miran raro, porque ellos tienen chalets enormes que les ha regalado mamá y papá, y cochazos, y escucho comentarios a mis espaldas sobre la idoneidad de que alguien «como yo» eduque a las futuras generaciones, que menos mal que sus hijos van a colegios privados (que ellos dicen que son privados, cuando son concertados).
Un día, harta de comentarios fascistas estilo «ese niño de 2 de primaria va a ser maricon» y demás no me pude callar, y tuve una discusión bastante fuerte con el compañero más pijo y retrógrado de todos, discusión a la 1ue se unieron en mi contra casi todos los compañeros.
Total, que no me hablo con ninguno de ellos, excepto con la de música que es un amor, y cuando me cruzo con algunos solo escucho risitas y comentarios despectivos sobre mi situación económica.
He puesto varias quejas en dirección, pero no me hacen ni caso. Parece que viven en una realidad paralela, si bien es cierto que el colegio esta situado en una zona bastante pudiente en cuanto a lo económico, todos los que trabajamos allí hemos estudiado lo mismo, hemos tenido que pasar una oposición y hacemos el mismo trabajo.
De verdad, no sé que astros se han alineado para que todos los maestros pijos acaben en el mismo colegio, siendo funcionarios y criticando todo lo público y defendiendo lo privado.
Gracias por leerme.