Hola lovers, llevaba dos días debatiendo en sí escribiros o no porque no sé como actuar.
A ver, esta historia es muy larga, con sus idas y venido así que intentaré resumirme.
Hace dos años conocí en mi anterior trabajo un hombre bastante simpático, agradable, alegre y gran padre (separado).
Yo en esa época tenía pareja, pero las cosas no iban muy bien, teníamos nuestras idas y venidas debido a problemas anteriores que llegué a perdonas o conductas de él pero que no pude superar. Eso me hizo acercarme más y más a ese compañero. Hasta el punto que quedé por tres “ocasiones” a solas con él, la tercera “ocasión” un 14 de febrero…no quedamos al final debido a qué le había dicho de vernos puesto había tenido una disputa con mi pareja allá a la noche, llevábamos horas y horas discutiendo y necesitaba salir, gritar y demás. Le escribí a las nueve y media o casi diez de la noche que sí podía bajar a donde vivía que necesitaba hablar y este chico fue, tras esa espera yo seguía discutiendo y llegué a un punto que me dio ansiedad y me tuve que tomar algo relajante, con lo cual llegó a que me quedara dormida… sí, dormida y este chico esperándome por mi ciudad a tener noticias mías. Me desperté de madrugada pidiéndole mil disculpas cuando vi todos sus whatsapp, le conté lo que me había sucedido, pero recibí un frío “Ok, no pasa nada”.
Al los días coincidíamos en el trabajo, también en sus guardias y le pedía disculpas y que notaba su cambio de actitud hacía a mí. Entendía la sensación que pudo llegar a tener estar esperándome en el coche a saber de mí. Pasaron dos meses después de ese suceso y cuando ya yo ya había desistido de intentar arreglar las cosas, un día en la cafetería del trabajo coincidimos y nos pusimos a hablar, ahí, sin más de como se sintió y el consejo que le dio un amigo suyo al día siguiente después de ese suceso, que le dijo que “no tenía necesidad de estas cosas”.
Bueno al final volvimos a quedar y en esa quedada, en la despedida, me besó.
La verdad es que el beso fue tan increíble… nunca había sentido tanto la necesidad de que alguien me besara y que encima fuera tan intenso.
Al llegar a casa me sentí fatal, horrible pero quise coger y pasar página, dejar lo que pasó ahí y ya está… pero no, no pudo ser, teníamos conexión y no podía evitar el no quedar con esa persona que me hacía reír y que luego me besara y me dejara como una niña con su primer beso.
Al cabo de varias quedada “bastantes la verdad” nos liamos y que voy a decir, fue magnífico.
Bueno, estuvimos un tiempo así, hasta mediados de año, viéndonos a ocultas de la compañía y de mi pareja, aunque de mi pareja… ni caso me hacía.
Comencé a sentir sentimientos hacía ese compañero de trabajo, gran padre y buena persona. Así que una tarde tomando unas cervezas con él decidí en contárselo y cuando en la despedida (porque sí, a veces quedábamos y no solo nos acostábamos, quedábamos también para tomarnos unos cafés, una cena o para unas cervezas y no pasaba nada) en la despedida le dije lo que sentía… su reacción? cara de asombro y asustado.
Me fui a mi casa llorando, el se distanció y yo me sentí fatal.
Yo ya no me sentía bien con mi pareja, no me sentía bien con él y no me sentía bien conmigo misma.
Pasando los días esta persona intentaba que nos viéramos y yo estaba esquiva, pero… al final no pude seguir diciendo que no puesto me moría de ganas de verlo.
Lo vi, pasó lo que pasó y así por tres ocasiones más.
La compañía decidió prescindir de mí debido a que estaban haciendo recortes de los temporales, así que me fui y él siguió ahí.
Yo acabé mi relación porque no podía seguir haciendo eso, pero él, ese compañero, seguía ahí.
Con el tiempo seguía viéndolo pero aparecieron conductas de él que me llegaron alejar. Teníamos planes, con hora concretada y desaparecía, sobre todo cuando quedaba con sus amistades antes de verme, se entretenía y se olvidaba de que había alguien esperándole.
Hubieron muchos roces, me distanció. A veces no hablábamos en días porque ni me apetecía saber de él, pero como TONTA, porque es así, caía.
La cuestión es que en las navidades pasadas después de cerca de un mes sin hablar con él por otra colgada que me hizo, me escribió el día que tuve el examen de una oposición que me estaba preparando. Él tenía esa noche la cena de navidad de la compañía, me dijo de vernos cuando acabara de cenar, que no se iba a ningún lado que quería verme y hablar, así que le dije que sí, sí… como otra TONTA más. Yo estaba en casa de mi hermana, ella me dejó prendas suyas, me arreglé esa noche que hasta yo misma me decía “estás fabulosa”. Habíamos quedado en que a las diez o diez y media me recogía en casa de mi hermana… y ocurrió lo que no me podía imaginar, menos esa noche y que él me había buscado… me dejó colgada.
Me dejó plantada en casa de mi hermana, arreglada y mi hermana consolándome. Le estuve escribiendo para ver como iba y repitiéndole varias veces que sí quería lo pasábamos para otro día ya que era la cena de su compañía, pero él insistía en que no.
De repente fue siendo más escueto en los mensajes, casi sin entenderle hasta el punto de preguntarme donde me tenía que recoger o donde quedábamos (cuando tenía la dirección).
Ese día me perjuré en desaparecer de su vida, pero… pero… a finales de diciembre el destino hizo que me lo cruzara en la calle, hablamos y volvimos a vernos y acostarnos.
A principio de año “de este año” me sentía rara y notaba cambios en mí, tenía un retraso de tres días en mi menstruación así que fui a hacerme el test… y sí, di positivo.
Contacté con él y le dije que teníamos que hablar. Se lo conté y aunque yo tenía claro de no tenerlo, tenía que saberlo ya que era una cosa de los dos.
Lo hablamos y fue bien. La semana de los preparativos para el aborto la compañía decide enviarlo a formarse a otra ciudad durante 10 días, así que no pudo estar conmigo físicamente pero sí cada día tras el teléfono llamándome y enviándome whatsapp.
Llegó el día, aborté, él me llamó a la noche y yo, yo estaba rara.
Los días pasaron y mi cabeza había cambiado hacía a él, me preguntaba que porqué había sido tan ridícula en caer varias veces cuando el destino me decía que no.
Pasó febrero, con ello los carnavales, yo había decidido estar en mi casa, tranquila y él… él de fiesta. Yo no paraba de pensar en que no teníamos cosas en común y que tal vez fue mi vía de escapé de esa relación.
Él me comenzó a notar más fría, distante y que hace él? Se me declara diciendo que siente por mí.
Qué hago yo? No me lo creo, porque siento la intuición en la que me dice que lo hace porque me ve distante.
Aún así le di una oportunidad, decidí probar a tener una “relación” pero sin ser capaces de llamarnos pareja, pero… LA CUARENTENA.
Eso hizo que casi no nos viéramos, hablar sí, pero vernos…
Bueno, comenzó la desescalada, nos volvimos a ver. El día que nos vimos me demostró que me echaba de menos, así fue durante dos semanas, pero volvió a hacer de las suyas, desplantarme.
Decidí que no quería tener nada más con él, se lo dije.
Volvimos a hablar a finales de veranos de este año, entre conversación y conversación se subió de tono pero esta vez le dine algo bien claro, no sentía, solo quería pasar un buen rato ya que la verdad es que el sexo con el era increíble. Él me decía que ok, pero que yo no solo le intereso para eso.
Quedábamos, nos acostábamos y me iba.
Así varias semanas, hasta que me decía de hacer planes con él y su hijo (ya anteriormente había visto a su hijo, en ocasiones puntuales) pero esta vez, esta vez era más constante. Antes era muy raro que lo viera cuando le tocaba al pequeño, pero esta vez hacía planes con él y con su hijo.
A mi me encantan los niños, tengo varios sobrinos y tengo muy claro que quiero ser madre, lo que la ocasión aquella no era la correcta.
Bueno, en ese tiempo él fue abriéndose conmigo, contándome asuntos suyos personales, como cosas de l familia, amigos o los problemas que está teniendo el pequeño con los estudios con esta nueva normalidad.
Hace unas noches cenando le pregunté s se había planteado volver a ser padre o sí cree que podría volver serlo y su respuesta… su respuesta hizo que me rompiera. Me dijo que no, que eso es algo que sintió con alguien y que no quiere hacerle algo de eso a su hijo.
Es cierto que él tiene 40 años y yo tengo 30, él ya ha tenido esa sensación y yo, yo la quiero.
Al final la conversación cambió y acabamos hablando de otra cosa. A los días yo le daba vueltas a ese pensamiento, yo no es que quiera ser madre ya, sobre todo porque quisiera tener a una persona al lado que se que va ha ser buen padre, pero sí es que llevo a lo tonto casi dos años con este señor (con sus idas y venidas y a ocultas al principio) pero sí, con él solo hasta después de la ruptura y me puse a pensar en que sí voy a seguir alargando esto con alguien que me ha dejado plantada en varias ocasiones, que no sabe que sentimientos tiene (aunque me ha dicho que eso no lo ha sentido por nadie) y que tiene sus 40 años, su vida resuelta y ya padre. Sin embargo yo aún tengo algunos caminos que recorrer y que él, aunque esto se alargara no querría ser de nuevo padre.
Volvimos a vernos el domingo pasado, fue un día muy bonito hasta el final. Volvimos a hablar del tema debido a que veía muchos bebés y le dije lo que pensaba.
Le dije que llevaba casi dos años con él y que yo sabía que él está bien como está y lo que ya tiene, pero que yo necesito construirme. Tener algo estable y crear.
Le dije que creía que pese a todo lo ocurrido, si seguía viéndolo es porque sentía por él, le dije varias cosas, hasta que lo quería… y él… él decía que sentía mucho por mí.
Me fui mal, no culpándole, culpándome a mí.
Me escribió un whatsapp al llegar a mi casa, me dijo que me quería contar algo, pensé que me diría que me quería, pero me dijo que echaría de menos mi olor puesto sus cojines huelen a mi perfume.
Me gustó lo que me dijo, pero no quise seguir más, me despedí le dije que esperara que consiguiera a alguien que fuera su compañera y que yo mientras, buscaré a alguien que sepa profundizar.
Me despedí… y ya está.
Estoy mal por dentro, mal porque sé que para él en estos dos años solo fui una compañía pero él nunca fue eso para mí.
Seguiré mis días, centrándome en lo que quiero y aprender de esto.
Creo que escribí esto para desahogarme puesto necesitaba contarlo.
Pd. Sí alguien me dice como dejar de esperar un mensaje suyo (porque aún así mi mente lo piensa) lo agradecería.
Un abrazo lovers.