Si eres fan acérrima de los esmaltes de uñas oscuros, seguro que alguna temporada has tenido que soportar la putada máxima de tenerlas amarillentas. El problema de esta situación es que te vuelves a pintar las uñas para que no se vea el tono amarillento y en consecuencia, nunca se aclaran. Es un círculo vicioso mega chungo.
¿Cuáles son las causas de las manchas amarillas en las uñas?
La más común es abusar de los esmaltes, sobre todo si son oscuros. El motivo es que la uña no se oxigena y la queratina se daña, por lo que la uña no se regenera. Además, muchos esmaltes tienen compuestos bastante chungos para la salud de tus uñas, pudiendo producir alergias.
Otras causas menos comunes pero a las que debes prestar atención son los déficits de vitaminas, el tabaco (que amarillea uñas, dientes y las yemas de los dedos) y ciertas enfermedades.
¿Y qué puedo hacer?
- Deja de fumar en caso de que lo hagas. Ya he mencionado los perjuicios del tabaco a nivel cutáneo.
- Cómprate un tratamiento para uñas que las protega y nutra. Este de Revox es lo más.
- Deja que tus uñas descansen un poquito entre cada aplicación del esmalte. Es importante que se oxigenen para evitar las manchas, grietas y heriditas.
- Usa SIEMPRE esmaltes sin acetona.
- Prueba a exfoliar tus uñas con una mezcla casera de azúcar, bicarbonato y limón, o bien con este exfoliante de Essence.
- Pon en un cuenco un poquito de agua caliente (pero tampoco ardiendo, no vayas a hacerte daño), pon un par de cucharadas de bicarbonato y una cucharada de vinagre. Sumerge tus manos durante cinco minutos.
- Después hidratate con aceite de ricino, de almendras o de coco. Son fantásticos para las uñas.
- Y si ni así consigues que se te pase, esta loción específica de Pranarom para uñas amarillas es una maravilla.
