Uno de los fenómenos virales sin duda de esta temporada es el programa de “La isla de las tentaciones” donde un grupo de parejas iban a poner su relación a prueba para salir más fortalecidos, exponiéndose a “tentaciones” y ver si son capaces o no de resistirse.

Más allá de lo que nos parezca o no el formato del programa y su planteamiento, como psicóloga me he parado a analizar que supone este tipo de programas para la población, si pueden llegar a tener un impacto real en nosotros y si este es positivo y negativo.

Por eso os traigo, las cosas que claramente NO hemos aprendido de este programa son bastantes:

  1. Cómo trabajar los celos

Que una persona sea celosa o no puede ser debido a muchos factores, ya que estos se definen como el miedo de perder a alguien o que nuestra pareja nos cambie por otra persona lo que nos lleva a tener una serie de sentimientos y actitudes que pueden ser muy intensas para la persona.

Es importante entender que todas las personas en algún momento pueden sentir celos, el problema viene cuando estos no se expresan de la manera adecuada, producen una bajada de autoestima y mucha inseguridad, empiezan a desarrollar conductas de control hacia la otra persona, etc.

La clave principal para gestionar los celos es identificar de donde vienen y que decido hacer con ellos una vez que los siento.

Y desde luego diferencias si esos celos son infundados, es decir, la persona en cuestión ha visto o tiene pruebas de una infidelidad o si son patológicos, es decir, cuando no hay ningún tipo de indicio.

(esto no es una justificación de los celos, pero para trabajarlos es importante conocer de dónde vienen)

Pero desde luego nunca se trabajarán viendo como tu pareja liga con otras personas con la idea de que eso no te debe molestar, y entender que es un trabajo en equipo con tu pareja ya que ambos queréis que la relación funcione, no un trabájate tú porque es solo cosa tuya, cuando es algo que afecta a los dos.

  1. La autoestima y el empoderamiento

A lo largo de los capítulos hemos ido viendo como chicas que se definían con muy baja autoestima fueron cambiando su diálogo, sobre que ahora se iban a centrar más en ellas y se habían dado cuenta que se querían más.

Hay una tendencia muy clara a confundir autoestima con egoísmo.

Esta sensación dentro del contexto que se da es totalmente irreal, no es que no se sientan así, sino que, en ese contexto artificial donde no están en su vida diaria, rodeadas de tentaciones que te doran la píldora, es muy fácil sentirse mejor y tener la falsa creencia de que esto ha hecho que te quieras más.

La autoestima consiste en un trabajo individual y mucho mas complejo que el decir “me quiero más”, es saber en qué aspectos de mi vida me siento más insegura, cuales son los miedos que sustentan estas creencias y ver que elijo hacer con ellas cuando aparecen.

Estos cambios, desde el análisis y el acompañamiento de un profesional podrán perdurar en el tiempo y sobre todo cuando aparezcan recaídas (que siempre aparecen) tener a alguien que te sustenta y te explique que ha pasado.

Mientras tanto, lo que se crea es una falsa idea de autoestima, que en cuanto vuelvan a su vida normal, volverán a aparecer todos los miedos y las inseguridades.

  1. Gestión emocional

Hemos visto que varias de las concursantes sienten una absoluta dependencia hacia sus parejas y cuando estas no están o cuando han cometido una infidelidad, se han visto totalmente desbordadas hasta unos límites preocupantes.

En el caso de Inma le llevó a tener que abandonar porque no podía aguantar el estar alejado de su pareja.

En el caso de Melyssa por ejemplo la cosa se complica incluso más, después de tener un montón de emociones desbordantes durante días y ataques de rabia, en el último encuentro que tiene con Tom, podemos ver una Melyssa cambiada y supuestamente empoderada que decide romper la relación.

Aquí volvemos a la misma trampa, probablemente no es la primera vez que Melyssa intenta dejar la relación, y es muy fácil que en un momento de fortaleza se consiga materializar, pero si todo lo que viene detrás y lo que ha sustentado esa relación no se trabaja, hará que Melyssa tenga todas las papeletas para volver al menor arrepentimiento de su expareja o seguir teniendo relaciones de dependencia.

  1. Encadenar relaciones

Y esta sin duda es una de las partes mas claves que hemos podido ver, como personas que entraban con una relación salían con otra.

Cuando hay una ruptura de pareja, es muy importante darse un tiempo para pasar ese duelo, para reubicarte a ti misma como persona, volver a conocerte sin tu ex, y para eso hay que darse tiempo y espacio.

Encadenar directamente con otra persona, es una forma muy clara de evitar ese duelo y ese dolor que te ha traído la ruptura, sin saber que las emociones no podemos aplacarlas ni dejarlas de sentir, y que tarde o temprano aparecerán de nuevo.

5. El «ser uno mismo»

Otro de los grandes argumentos de muchos concursantes es que sus parejas no les dejaban “ser ellos mismos” como excusa para poder hacer lo que en ese momento les apetecía y no sentir culpa por hacerlo.

Al final es una forma de justificar el hacer cosas que se salen del acuerdo que tú tienes con tu pareja, sea el que sea, para poder salirse con la suya sin ningún tipo de remordimiento.

Por lo que, ninguno de los participantes que deciden hacer cosas que saben que les van a molestar a sus parejas, deciden responsabilizarse de lo que han hecho ni asumir sus actos, siendo más fácil culpar al otro.

Al final este tipo de programas por su alcance lanzan un mensaje muy potente y por eso, es importante entender que lo que vemos en los programas al final, en parte, los podemos tomar como referentes sin entender todo el entresijo que hay detrás de cada caso y por eso hay que plantearse que tenemos detrás de todo esto y que me están enseñando realmente, para no tener los referentes equivocados.

Aida Vallés Psicóloga, sexóloga y terapeuta de parejas.

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