Isabel Coixet (1960) es sinónimo de delicadeza, emoción y romanticismo del bueno. Sus personajes siempre se encuentran buscándose en un mar de inseguridades. Humanos, demasiado humanos envueltos en pura poesía. Mi favorita, «A los que aman»

Paula Ortiz (1979) Abrupta, poética, dura, de impactante puesta en escena. Algunas veces podemos ver en ella algo de Mallick otras veces, tintes de tantos cineastas anteriores, que se denota su gran conocimiento al que le aporta su personalidad. Una directora actual imprescindible que no te deja indiferente, mi favorita»De tu ventana a la mía» (2011)

Patricia Ferreira (1958) de mirada directa, se trata de una buena narradora. Cuenta historias, sobre todo de género negro, con cierta sobriedad propio del que sabe manejarse. Perfila muy bien los personajes y es sinónimo de buen entretenimiento. Mi favorita su drama sobre la memoria y la reconstrucción, «Para que no me olvides» ( 2005)

Pilar Miró (1940), de una complejidad a veces asfixiante, amante de los silencios y los planos un poco contemplativos. Feminista, sus personajes están adelantados a la época. Sabe divertir, ser la más cruel o la más inquietante. Una carrera brillante que se apagó demasiado pronto. Mi favorita, «El pájaro de la felicidad» una cinta retrospectiva, sobre las consecuencias emocionales de una agresión sexual.

Josefina Molina (1936), abiertamente adelantada a su tiempo le gusta jugar con la realidad y la ficción. Se adelantó a su tiempo contando historias dónde la psicólogia de la mujer era el centro. La encuentro muy tocada por el cine francés e italiano de épocas anteriores. En mi película favorita»Función de noche», podemos ver como la cámara a veces parece un espía.