Repetid conmigo: bendito es el Mercadona entre todos los supermercados y bendito es el fruto de su almacén. ¡Amén!

Ya os he hablado del gel íntimo hidratante de Deliplus (what a maravilla), de las castañas asadas en bolsa (otro top ventas para mi) y del bizcocho de chocolate (se me hace la boca agua). Hoy me quiero centrar en la zona de perfumería, concretamente en un producto que para mí es maravilloso, delicioso, increíble y, además, BARATÍSIMO.

¡El gel de ducha exfoliante suave!

Llevo usando este gel desde abril más o menos, y aunque a veces le pongo los cuernos con otros geles (porque me pilla bastante lejos el Mercadona y necesito reponer el gel de ducha, no por otro motivo), siempre vuelvo a él. ¿Por qué?, os preguntaréis.

En primer lugar, el precio. Cuesta 2,20€ y trae 750 ml. Baratuqui no, lo siguiente. De todos modos seguiría comprándolo aunque valiese 5, para qué mentir.

Huele que os morís. Es de kiwi y albaricoque, pero yo noto sobre todo el olor a albaricoque, que me vuelve loca. No sé si habéis probado unas gominolas que tienen forma de corazón y dos colores, que saben a albaricoque. Pues huele a esas gominolas. Una maravilla.

Como su propio nombre indica, es exfoliante. Tiene gránulos de kiwi y deja la piel tremendamente suave sin irritar nada de nada. Yo tengo las piernas bastante delicadas, sobre todo en invierno, y con los cambios de temperatura me salen ronchos y rojeces. Pues con este gel no me pasa.

Ya sólo por el olor os aconsejo probarlo, pero es que la piel queda muy bien después de su uso, así que compensa muchísimo invertir esos dos euritos (menos, en realidad) para volveros locas en la ducha. Os encantará, palabrita.