ATENCIÓN: ANTES DE LEER ESTE POST ASÉGURATE DE HACERLO CON EL CHIP SARCÁSTICO ACTIVADO, YA QUE ESTÁ ESCRITO (CASI) TOTALMENTE DE COÑA. GRASIAS PANAMÁ.
Enamorar a un chico cuando pesas más que la media puede ser complicadísimo, porque como todas sabemos, los hombres sólo se llevan por el físico y todos aspiran a follarse a una modelo de Victoria’s Secret. Y eso es así porque las redondeces son feas y que les guste una gorda es algo prohibido y sólo reservado a auténticos frikis degenerados, a no ser que lo que busquen es que todos sus amigos se rían de él, que eso de tener gustos propios y que decidan por ellos mismos, de eso nada.
Total, que visto lo visto a las gordas no nos queda otra que tirar de armas secretas para enamorar a los chicos, ya que Diosito, el día del reparto, decidió que tenía que hacernos gordas porque si no ya era demasiado abusar para las demás, ¿sabéis, no? Hubiese sido mucha tela. Pero no se preocupen chicas que aquí la Wallace tiene las fórmulas infalibles para que cualquier macho cabrío que se te antoje caiga totalmente rendido a tus pies de gorda, atiende:
1. Mi primer consejo: MAQUÍLLATE. Píntate como una puerta. Contouring, strobing, labios rojos, pestañas postizas obligatorias hasta para ir a por el pan. Lo que sea pero, ¿encima de gorda, fea? Eso sí que no. Haz un esfuerzo y, al menos, que seas guapa de cara. ¿Que lo tuyo no lo arregla ni la pistola de Homer? No te preocupes, sigue leyendo.
2. Embórrachales (o mételes droja en el Cola Cao). No hay mujer fea sino poco ron, que dicen los eruditos de discoteca y ciclo (ciclo de pincharse, claro, no formativo). A partir de la cuarta copa pasarás de una talla 50 a una 38 sin necesidad de dejar a un lado el bote de Nutella diario.
3. Hazles brujería. Las gordas no tenemos más remedio que invertir en ciertas técnicas para conseguir que un hombre se fije en nosotras, acéptalo. Así que tira de Teletexto y apunta los teléfonos de las mejores médiums y videntes que encuentres. Cosa fina.
4. Explota tus enormes tetas. A los tíos les encantan las tetas, ¿no? Pamela no era la favorita de Baywatch por tener el pelo rubio, precisamente. Así que aprovecha tus enormes mamellas de gorda y sácales tajada al máximo para ganarte su atracción. ¿Que eres una gorda sin tetas, de esas? Lo siento entonces, cari, lo tuyo es causa perdida, así que mejor te compras un vibrador.