Primero de todo: ¿POR QUÉ?. Y lo pregunto muy en serio. ¿Qué les pasa en la cabeza a esas personas, hombres y mujeres eh (no penséis que son solo ellos), que sin conocer a alguien ya ven eso y DIRECTAMENTE se sienten atraídos? ¿En qué momento se ha convertido esto en algo exótico o mito sexual? ¿Es que las personas con tatuajes o rastas follan mejor? ¿Hay algún estudio o estadística y yo no me he enterado?

No os digo las veces que he oído el típico comentario de “¡qué sexy es ese piercing/tatuaje” o peor todavía cuando llega el “con esas rastas seguro que blablabla”. Y luego está el que se lleva la palma: “Nunca me he liado con una chica como tú”

¿Como yo que?

EN SERIO GENTE: ¡¿QUÉ OS PASA?! ¡Que somos personas normales, eh! Sí, llevo rastas, pircings y tatuajes. Todo ok, relax. No pasa nada. No por eso somos mejores o peores. Entiendo que te llame la atención más un tipo de persona u otra, o que te puedan atraer ciertas cosas de alguien (dentro de una afinidad, no me vengáis con lo de «los polos opuestos se atraen» porque no). ¿Pero que dejen de lado toda la personalidad de quien tengan delante por qué (¡SORPRESA!) tiene «eso» que la hace distinta y que quiero probar? Superficial, penoso y asqueroso a la par.

Es como si a mí se me metiera entre ceja y ceja que estaría guay follarme a un tío con camiseta de punto, bermudas con pinza y sandalias con calcetines. Todo lo opuesto a mi chándal del mercadillo y mis bambas rotas. Cero sentido. Lo he probado y ya os digo que la propia experiencia me dice que (en mi caso) es imposible crear un vínculo emocional con alguien tan opuesto a mi forma de vivir y de ver las cosas. Y por eso no entiendo ese interés físico y emocional por lo distinto o lo prohibido.

Con los años he visto que tu apariencia te suele definir, por lo que es probable que cuando conoces a alguien «opuesto/a» a ti no parece tener tus mismos gustos o intereses a simple vista. Y me parece muy casposo que se me acerquen por el mero hecho de ser distinta al resto, o por qué (¡al loro!) «seguro que sus amigos fliparian si le vieran con una chica así», o porque tenía que probar si «es verdad que somos unas almas libres» y es eso lo que quieren ahora. Repito: Que puto asco.

¿No sería mejor buscar con quien se pueda tener algo afín en la vida? Lo digo porque si lo pensamos hasta tiene su lógica: Cuantas más cosas en común, más planes surgirán y más divertido será todo, ¿no?.

Y estoy segura de que a muchas de vosotras os pasa con otras cosas. No me hace falta ni preguntar, voy a poner ejemplos: Por el color de piel (curioso cuanto menos, pero jodidamente real), por el tamaño de los pechos o del culo (aquí para gustos colores, pero cuando es obsesivo da un poco de asquete), por como te vistes o cómo andas (porque claro, ir en minifalda es una clarisisisisima invitación), por tu puesto de trabajo (porque si, tías, resulta que hay trabajos más sexis que otros como por ejemplo ser enfermera, bombera o profesora, que van todo el día con lencería y liguero…), y podría seguir.

Pena me da las veces que se nos ha acercado alguien con el objetivo de ir a la cama, diciendo cuánto le ha llamado la atención esa característica. Si, a lo mejor eres la única en todo el local que la tiene. Y sí, tienes otras muchas cosas cualidades pero es que si vas a utilizar eso como tu arma para romper el hielo… Chico, ya empiezas mal porque cuando una simple apariencia, cultura o identidad resulta ser algo sexual (atención a esto): Nos estás objetivizando y estás tomando ese rasgo o identidad como algo exclusivamente erótico cuando no debería serlo.

 

Y ahí es cuando suenan todas las alarmas.

Moreiona