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A ver, tengo que ser sincera. He tardado en ver esta serie de HBO porque así de primeras la sinopsis me daba un poco de pereza, especialmente la parte musical.

Soy moñas para las pelis y series pero los musicales no son mi fuerte, y una serie en la que se pasan la mitad del tiempo cantando me daba un poco de repeluco.

Entonces llegó noviembre, los días lluviosos, la segunda ola, y yo me vi necesitada de series amenas y divertidas. De un poquito de amor y color en mi vida, y decidí darle una oportunidad. Así llegó Zoey’s Extraordinary Playlist a mi vida.

ZOEY’S EXTRAORDINARY PLAYLIST — «Zoey’s Extraordinary Glitch» Episode 108 — Pictured: (l-r) Jane Levy as Zoey Clarke, Skylar Astin as Max — (Photo by: Sergei Bachlakov/NBC)

Para los que todavía no la hayáis visto (no ha petado, así que seguro que muchos la estáis descubriendo), Zoey es una programadora informática que curra en una de las empresas más molonas del sector y lleva una vida tranquila en su burbuja de curro y poco más. Entonces un día a la muchacha le hacen una resonancia en la cabeza que sale regu y desde entonces, la prota es capaz de escuchar en forma de canción los sentimientos de la gente que la rodea. Vamos, que su vida se transforma en un musical constante sin que ella pueda hacer nada para evitarlo.

Esta es la idea principal, pero mientras tanto la serie es capaz de tratar un montón de temas que reconozco no esperaba. A pesar de su tremendo colorido (qué gusto da cuando una serie está hecha con tan buen gusto), no todo es de color de rosa en la vida de Zoey, que acabará aprovechando su ‘poder’ para echar un cable a amigos y familiares que la necesitan.

Jane Levy (la prota) es una auténtica monada y los actores secundarios (hola, su jefa es mama Guilmore) no se quedan atrás. Además, me gusta mucho el rol de las mujeres en esta serie. Aquí ellas son las jefazas que aunque tienen sus dramillas, salen adelante como buenas jabatas.

Amor, lagrimones, familia, amistad… Esta serie le da a un poquito de cada, y lo hace con empatía, naturalidad y una chispita de magia. Me parece la serie perfecta para ver ahora que se acerca la Navidad, y sin duda, una recomendación WLS que creo que os puede interesar.

 

 

Y que sepáis que ya está confirmada una segunda temporada, ¡VIVA!

 

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