Yo siempre he sido de lanzarme pero piensa bien qué quieres, independientemente de la situación actual, la tuya es que no te faltan ofertas de trabajo así que aprovecha. Primero dices que estás a gusto con tu trabajo y acabas diciendo que serías más feliz en el otro. Quien no arriesga, no gana. Eso sí, negocia bien las condiciones. Yo no cambiaría a peor y además sin garantía de estabilidad. Crees que ese trabajo te hará más feliz pero ¿eres feliz ahora? A veces idealizamos una profesión y lo que la envuelve (te lo dice una que dejó un trabajo donde no ganaba mucho pero era feliz, para trabajar de «lo suyo», aguantó una semana, salió huyendo y ahora se dedica a algo totalmente diferente y es feliz de nuevo). Tú tenías la idea de vivir en la ciudad pero ¿estás contenta en el pueblo con tu trabajo con el que no te llevas problemas a casa? ¿o estás asqueada y echas de menos la gran ciudad y añoras tener tu propio piso?
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