Se llama INSATIABLE, se estrena el 10 de agosto en Netflix y se supone que trata el tema del acoso escolar desde el humor (negro). Por ahora solo hemos podido ver el trailer pero en las redes se ha liado a tope (hasta se ha creado una recogida de firmas en Change.org) y con toda la razón del mundo porque hay demasiadas cosas que están mal en esos escasos dos minutos de adelanto. Da la impresión de que lo que buscaban es la polémica porque si no, no se entiende.
Que sí, que puede ser que luego veamos la serie y resulte que está cargadita de ironía y sarcasmo en forma de moraleja pero, así de primeras, apesta toxicidad todo el rato. Así que, basándonos en el trailer, no podemos evitar desconfiar de su mensaje por los siguientes motivos:
Ahora puedo ser la exgorda que se vuelve estudiosa, deportista o princesa. No, prefiero vengarme.
Ya sabéis que las gordas no podemos ser estudiosas, deportistas y mucho menos princesas.
- Empezaremos con lo más evidente: la chica gorda protagonista es una actriz delgada disfrazada de gorda. VAMOH A VEH, CAREEEENIOS… WTF!
- El concepto de venganza de una exgorda. ¿Qué puta necesidad? O sea, el movimiento body positive lleva años luchando contra el estigma de las corporalidades no normativas y ahora pretenden decirnos que podemos vengarnos de todos aquellos que nos han machacado porque -¡EH!- si pierdes peso estás legitimada para decir «aquí estoy yo». La venganza nunca es la solución a nada y que en una serie de instituto fomenten esto me parece muy feo.
- Perpetúa estereotipos corporales muy nocivos y tóxicos, reforzando la idea de que el éxito personal está directamente relacionado con el peso (en concreto con la delgadez). Un fat shaming de manual.
- Proponen a una protagonista que gana autoestima cuando pierde peso y esto, además de muy peligroso, es una falacia brutal. El empoderamiento tiene que trabajarse desde dentro, nunca en función de entrar (o no) dentro de unos estándares corporales aceptados por la sociedad. Más fat shaming Y TAL.
- Una cuestión tan grave como el bullying no se puede trivializar y mucho menos animar a los que han sufrido acoso a tomarse la justicia por su mano. Lo suyo sería trabajar la diversidad en positivo, pero parece que eso es demasiado poco efectista o algo así…
- La manera en la que la protagonista baja de peso es muy inquietante. Le dan un puñetazo, le rompen la mandíbula y claro, no puede comer. ¿Qué tipo de mensaje están enviando a las chicas que ven esta serie? Pues el de siempre: si no coméis os volveréis delgadas y populares… así a priori, UNA PUTA MIERDA.
- Queremos más series con protagonistas gordas, sí… queremos más visibilidad pero de manera natural y responsable. Estamos un poco cansadas del drama (sobre todo si está mal llevado) y creemos que para romper con todos esos topicazos lo que hay que hacer es mostrar personajes gordxs diferentes y, sobre todo, que sus historias no giren en torno a los kilos toooodo el rato.
Todo esto es lo que sacamos solo viendo el trailer de la discordia pero esperaremos al 10 de agosto para ver si el mensaje que mandan a cientos de miles de adolescentes es tan terrible o, simplemente, quisieron llamar la atención del gran público haciendo las cosas regular. Pese a todo quiero pensar (intentando ser muy positiva) que estos experimentos, aunque muy mal enfocados, ayudan a tomar conciencia de lo horrible que es condicionar la vida de una persona por tener un físico que, por la razón que sea, se sale de lo normativo. Solo una cosa más, amigos productores de series: hacer series de humor sobre cuestiones que afectan de manera muy negativa a una parte de la población que está en constante lucha contra la discriminación que sufren es bastante delicado (y de muy mal gusto)… son ganas de meterse en un jardín.
