Hola bonitas! Creo que vengo más por desahogarme que por otra cosa, porque mi cabeza hace días que me indica lo que debería aunque mi corazón va a su rollo.
Empecé con mi pareja hace poco más de un año, un hombre encantador y aparentemente comprensivo, y aunque al principio no iba en serio ni yo quería ir más allá porque me daba un miedo terrible iniciar una relación y más con un hijo de por medio, me enamoré. Al principio iba bastante bien, pero poco a poco he ido conociendo su inestabilidad, deudas por todos los lados (le he pagado cosas varias, ya son unos cuantos cientos de euros) y algunas incoherencias entre lo que me dice y lo que hace. Sé que quiere solucionar todo ese caos y me ha pintado un futuro maravilloso, pero nunca llega, ni siquiera con pequeños detalles… Y aquí viene el problema, desde hace varios meses empecé a tener una ansiedad creciente, unida a una sobrecarga laboral, algunos altibajos familiares y la situación en general.
Ahora mismo estoy con un trastorno de ansiedad generalizada, yendo a terapia, cada vez con medicación más fuerte y de baja. Parece que voy mejorando, pero cada vez que estamos juntos (una vez a la semana a lo sumo, aunque él tenga más ratos libres) acabamos discutiendo porque yo siento necesito algo más de comunicación, compañía y estabilidad. Sé que lo intenta pero siempre acaba dejándome de hablar y al rato (o días) haciendo como si nada, o culpandome y diciéndome que no me estoy esforzando. Noto que me he quedado sin nada de autoestima… Y sí, que tengo una dependencia emocional del copón.
La terapia va despacio y mi ansiedad en aumento, mi paciencia bajo mínimos, me estoy planteando acabar con esta relación, pero en este momento me da un miedo terrible… Y siento una soledad abrumadora, desde que empecé así me he ido aislando y poniendo en el centro la relación. Alguna ha pasado por algo similar? Hay vida más allá de la ansiedad y la ruptura? Merece la pena apostar temporalmente por una relación con «aparente» futuro?
Gracias mil por leerme!