A ti te mando mucho ánimo y fuerza y espero que te mejores. Eres una valiente por haber sido capaz de hablar de lo que te pasó. Nadie debería callarse algo así.
A tu madre, que espero que lea esto, espero que tus hermanos la abandonen en una residencia cuando sea mayor y que se muera de soledad, sin el apoyo ni el cariño de nadie.