Hace unos 5 años me mudé a mi propio piso y poco después me hice amiga de mi vecina de abajo. Empezamos como amigos hablando casi todos los días sobre cualquier cosa, saliendo de fiesta juntos, cenando, dando paseos. Todo iba bien, incluso conocí a su familia y amigos. Pero después de unos 8 meses, empecé a sentir algo más por ella.
Tras un tiempo intentando averiguar si ella sentía lo mismo, decidí decírselo porque me estaba volviendo loca. Pero cuando finalmente se lo dije, me respondió que no me veía de esa manera. Fue un palo, me alejé un poco para reflexionar sobre mis sentimientos y después de unas semanas sin hablar mucho con ella (ella tampoco me buscó), me di cuenta de que lo que sentía era algo pasajero y que podía superarlo y seguir siendo amigas.
Sin embargo, cuando intenté retomar la amistad, ella ya no respondía como antes. Intenté hablar del tema con ella varias veces, pero siempre me ponía excusas para no quedar. Al final, le pregunté directamente por qué no quería verme y me dijo que temía que volviera a enamorarme de ella.
Yo tengo claro que no, pero tampoco quiero tener que insistir. Me gustaría de verdad volver a ser amigas sin más, pero ya no sé si insistir o dejarlo pasar.