Hola a tod@s! Quería contaros una pequeña historia que me sucedió durante los tres años y medio de duración del tratamiento con brackets!
Una de esas noches que sales de locura con tus amigas, fiesta, alcohol, risas acumuladas, conocí a un chico que parecía ser interesante…
Tan interesante que decidimos seguir quedando y conocernos más. Llegó el día en que acabamos en su casa «viendo una película» (típica excusa para acabar mojando el churro). La no che se puso interesante y… pum! Ya estábamos en la cama, sin ropa, con los preliminares…
Es aquí cuando decidí ir bajando por su pecho hasta llegar a su pene… Con tan mala suerte que solo metérmelo en la boca (perdonar la expresión) tenía un hierro suelto y le corte… Tanto que empezó a sangrar sin parar…
Como buena enfermera (que es a lo que me dedico) decidí que había que poner betadine sin pensar que aquello picaría más! Mi cara era de díos mío que verguenza estoy pasando!!!
No volvimos a quedar… Al año más o menos volvimos a encintrarnos de fiesta… y decidimos retomar lo que habíamos dejado a medias. Su primera frase al llegar a su casa fué… Hoy no me vas a cortar en el pene no???