Todas hemos salido alguna vez con el autoestima por las nubes, con el modo pivonazo activado y con ganas de comernos el mundo (y lo que no es el mundo), vamos que sales de tu casa y se oye de fondo «Single Ladies» y vas andando zarandeando el culo a lo Beyoncé y pensando «HOY FOLLO». Desde que me quedé soltera hace un par de años, me dio por salir de fiesta con una amiga, siempre salimos las dos solas y siempre acabamos ligando y echando unos bailes (porque si sales creyéndote la mismísima Beyoncé nada puede salir mal). Un día esos bailes se fueron un poco de madre, mi amiga se ligó a un francés y yo a un negrito (no sé de dónde concretamente) y que si ahora nos magreamos, que si vamos a por una copa, más magreo que en el metro. Acabamos yéndonos a «dar una vuelta», una vuelta que acabó en un hotel, cada una con el suyo en una habitación. Me fui al lío con el mío y lo primero que hace es bajarse al pilón (yo pensando bendito momento llevaba meses sin un oral) BUENO. BUENO. El chico se debió de pensar que en vez de un clítoris era un joystick de la play1… No insistas que no se va a borrar por más que lo frotes. Qué dolor. Así que nos pusimos al lío y ahí tenía todavía menos maña. Yo, borracha y decepcionada decidí irme de la habitación sin derramar ni una lagrimita. Ahora qué tocaba? Joderle el polvo a mi amiga para no quedarme en la puta calle :) cosa que no quería hacer. Fui a su habitación después de haber hablado con ella y ya habían terminado y le conté mi historia al ligue de mi amiga. Le debí dar tanta pena que llamó a un amigo suyo también francés y vino. Felices los 4. En la misma habitación. Overbooking. Empezamos follando en el baño y ellos en la cama y acabamos follando todos en la misma cama, con manos al pan. Fue como un polvo interactivo en el que cada una estaba con el suyo pero los 4 juntitos. Me desperté con un tío a cada lado y todos en pelotas. Epic. Los «hoy follo» a veces se cumplen.