Varios puntos (lo digo así porque no das más detalles):
-Igual la rutina de gimnasio que sigues no es la más adecuada (dale prioridad a la musculación y deja en segundo lugar el cardio). La musculación sube el metabolismo (sube las pulsaciones moderadamente) y mejora la circulación (especialmente en gente con sobrepeso y obesidad, por la retención de líquidos que se forma, porque el cuerpo está «inflamado»).
-¿Te han mirado la hemoglobina glicosada? Es importante vigilarla y que te pongan una dieta acorde a este problema (nada de dietas de fotocopia de 1000 calorías con 50% de hidratos, etc). En estos casos es recomendable hacer una dieta anti-inflamatoria, cetogénica, etc (depende de cada caso y del nivel de adaptación de cada persona).
-Y hay que vigilar las glucemias (esas que dan por saco por la noche y provocan los atracones). El estrés (subida de cortisol) influye en esos atracones.
-Es recomendable vigilar el TSH y la T4. Porque un día parece que están bien, pero no es la primera vez que un paciente se descontrola en los meses siguientes por diversos factores, o como tiene hipotiroidismo subclínico, pasan de tratarle hasta que se ven las consecuencias después. Si no te lo mira ese endocrino, cambia de endocrino y que te miren esos valores.
-Si no eres capaz de hacer una dieta (estrés, problemas personales… ), no te preocupes y date tiempo. Es importante estar estable para conseguir un objetivo (bajar de peso), no fustigarse y no acabar con un trastorno obsesivo causado por la comida (y por el perfeccionismo o exceso de autocrítica). Mentalízate de que alguna vez vas a «caer», que no vas a hacer una dieta perfecta las 24 horas (somos humanos) y que esas caídas sirven para aprender y para fortalecerte (resiliencia). Paso a paso.
De tu endocrino pues como uno que tuve, que encima es una «eminencia» que se cree House (que el día que repartían la empatía en el mundo, él estaba cagando en el baño) y le dedican artículos del periódico. No está actualizado, no sabe ni lo que es un lipedema/linfedema y se basa en los viejos mantras que aprendió al salir de la facultad (y nada más).
Intenta impermeabilizarte de sus comentarios: ¿tiene una cámara en tu casa para saber lo que comes y lo que no (no, eso no se sabe al 100% ni por el resultado de las analíticas)? ¿Sabe qué tipo de ejercicio haces, cuánto tiempo? No.
Esto es como cuando vas a comprar un coche (al fin y al cabo, tú eres un cliente y pides un servicio en forma de consulta) y no estás conforme con lo que te dan, porque te dan un coche con una serie de averías de fábrica e intentan venderte que «todo va bien». Pues que te vas a otro concesionario donde no te traten por tonto. No hay necesidad de pasarlo mal por un «iluminado» que no sabe ni por donde le da el aire y que tiene el ego inflado por tener un título colgando de la pared. Hay endocrinos que se olvidan del aspecto psicológico cuando atienden a sus pacientes.