Le conocí en una discoteca y no paré de reír toda la noche. Era 14 de febrero y el ya estaba borrachos. Se acercó a mi y me dijo: Tú serás mi próxima novia, te he visto y me he enamorado de tu rostro.
Esa noche nos besamos e intercambiamos número y cada uno a su casa, nada de rollo. Al pasar los días nos escribíamos por whatsapp para quedar. Tuvimos tres citas, donde el se la curraba mucho para impresionarme. Me llevo a pasear en moto cuando aún nevaba, a escalar y no le importaba presentarme a todos sus amigos. Hacia planes conmigo para el verano y yo me hacia cada vez más ilusiones, porque pensaba que había conocido al hombre perfecto. Era un caballero, quería a su perro, trabajador, responsable, y era guapísimo. Pero yo ya sentía que algo tenía que ocultar, que no podía este hombre ser tan perfecto.
Todo cambió cuando en la tercera cita me dijo que había terminado con su novia por problemas de distancia hace unos tres meses y aún seguían hablando por whatsapp. A mi eso me consternó un poco pero lo dejé pasar, le dije que no me importaba y fue esa noche la primera vez que nos enrollamos. Lo sentí un poco mal e inseguro de enrollarse conmigo pero luego se le pasó y me volvió a llamar para quedar otro día. Me decía que solo quería tener citas sin enrollamientos, pero al final de la noche terminábamos enrollándonos. Se contradecía mucho. Luego me llegó a decir una noche que ese iba a ser el último día que nos veíamos porque se iba a su pueblo (donde vivía su novia). Yo sabía que el iba a volver con ella. A quien vamos a engañar, llevan 15 años de relación, eso no puede terminar fácilmente por una chica que conoce un par de semanas.
El se fue y yo me quedé muy triste y llorando porque le había cogido mucho cariño. Luego de 20 días me volvió a escribir y yo desesperada le contesté y volvimos a quedar. Me comentó que había vuelto con su novia, tomamos un par de cervezas y me besó. No pude detenerle porque yo también quería eso, quería estar con el y que sea mío. Nos enrollamos de nuevo, me fue a dejar a casa, y el siguiente día me eliminó de whatsapp. Le escribí para desearle un buen día y me envío un mensaje diciéndome que era mejor que tomáramos caminos separados, que yo buscaba algo serio y él no.
Quedé abatida y volví a llorar, porque pensé que era el fin y porque tenía tantos recuerdos con los de lidiar, y a la semana, que me sentía mejor, me volvió a escribir para disculparse y para hablar en persona. Esa noche no nos enrollamos, solo quedamos como amigos. Pero luego volvíamos a quedar en fiestas o a solas y el siempre se quería acostarse conmigo, se emborrachaba y volvía a mi. Me decía que se había quedado obsesionado y que yo era un peligro, pero que no me podía enamorar, solo divertirme. Me pedía que vaya a por el y me eliminaba. Era una rutina y como ya se sabía mi número de memoria me volvía a escribir en semanas. La última vez que nos enrollamos, me cansé y me dije a mi misma que sería la definitiva.
Sé que lastimo a dos personas, a su novia y a mí y que el juega conmigo. Lo odié pero no he llegado a decírselo porque me ha vuelto a eliminar y yo también lo he hecho, pero quisiera desahogarme y decirle que la persona que me gustaba antes no era él. Y que es un capullo. Tengo aún muchos sentimientos encontrados. Este chico tocó mi fibra y es que aún le pienso todos los días y me desespera saber que es un mes y no sé nada de él. No sé qué hacer, quiero sacarme todos estos sentimientos y no puedo. Le odio pero aún también le quiero