Me siento bastante ridículo escribiendo esto, pero creo que en este sitio podríais ayudarme a aclararme un poco más. He estado en una relación con una chica durante dos años y todo ha ido siempre muy bien. Tenemos nuestras pequeñas discusiones de vez en cuando como todo el mundo pero en general estamos muy contentos.
Ella conoció a un chico nuevo hace cinco meses porque él empezó a ser parte del grupo de la facultad en la que está. Muchas veces quedamos los dos con el grupo porque conmigo también se llevan muy bien, y cuando tuve la oportunidad de conocerlo mi impresión fue bastante buena.
Es majete, bastante amable y también es evidente que muy inteligente. Y no hablo de conocimientos académicos, más bien de un tipo de inteligencia que le lleva a hablar con quien sea de cualquier cosa e invita a reflexiones interesantes. Esto llamó bastante la atención de mi novia, que también es fan de ese tipo de charlas. Y se pasan muchísimo tiempo hablando, tanto en WhatsApp como cuando quedamos con los demás.
He intentado unirme a ellos en más de una ocasión porque muchos de los temas que tocan me interesan, y aunque ellos encantados de que yo también participe, se nota que han formado una especie de burbuja de la que me siento fuera por mucho que lo intente.
A veces no sé ni de qué hablan porque me parecen temas complicados que me cuesta entender y me hace sentir inferior en comparación. Como si no pudiese darle a ella intelectualmente lo que necesita y por eso tiene que estar buscándolo con este chico. Soy consciente de que no puedo ser su número uno para todo, que los amigos también son una parte importante de cualquier persona y que llenan campos que una pareja no. Pero si siente que quiere desconectar después de un mal día y buscar conversación inteligente su primera opción no soy yo y eso me hace sentir mal. Siento que estoy fallando como novio.
Le saqué el tema dos veces, dejando claro que me parece bien su amistad con él, cosa que nunca le iba a echar en cara. Pero que sentía que a veces no estaba a la altura. Ella me tranquilizó diciendo que simplemente tienen una amistad de frikis totales (en verdad se puede resumir así), que conectan bien y que se entienden bien en sus paranoias, pero sólo eso.
Aún así, puedo ver que ‘avanzan’. Me explico: hablan más veces al día, me habla más de él, de las conclusiones a las que han llegado ambos… etc. No obstante, nuestra relación no se ha ‘deteriorado’ tampoco, seguimos con nuestros planes, nuestras rutinas, el cariño y el sexo nunca me faltan. Y aún así siento que sobro en mi propia relación. ¿Os preocuparía si estuvierais en mi lugar, o es una tontería?