Hola chicas! Os leo todos los días y he pensado que era el momento de ser yo quien busque apoyo por aquí.
Resulta que hace unos 3-4 meses conocí un chico por casualidades de la vida y todo me dio un vuelco: conexión perfecta, conversación constante, mucha química, mucha atracción… Empezamos a quedar a pesar de las banderas rojas que me decían que no lo hiciese (él tiene 11 años más que yo y justo acababa de salir de una relación de 6 años. Cuando digo justo, me refiero a que la ex se fue de su casa justo cuando lo conocí).
Yo siempre he estado con la mosca detrás de la oreja, pues su ex siempre estaba presente en su vida de forma indirecta (antes convivían juntos y aún había cosas en su casa, todos sus amigos cercanos son amigos en común, etc.), pero jamás se refirió a ella de forma melancólica y sus acciones siempre me han demostrado verdadero interés. Además, me había confesado que su relación llevaba «muerta» muchos meses, solo que habían tardado en dar el paseo para dejarlo oficialmente.
No obstante, tras casi tres meses maravillosos de días juntos, comidas, viajes y muy buenos momentos, me dijo que la ex le había hablado, que su ex suegra estaba muy enferma y que se le habían revuelto algunos sentimientos y que quizá le daba otra oportunidad porque le daba pena no intentar salvar su antigua relación. Yo le pedí un par de semanas sin contacto porque no quería estar ahí en medio y, efectivamente, a las dos semanas y dos días me habla por whatsapp: Me confirma (sin mencionarlo directamente, el muy cobarde) que ha vuelto con su ex, pero también me dice que le ha costado aguantarse las ganas de escribirme este tiempo, que se ha acordado constantemente de mí, que lo he marcado más de lo que él pensaba y que se había dado cuenta a posteriori de lo importante que había sido, que podría escribirme sin control… (total, una mezcla de cosas que, realmente, no sé si venían a cuento cuando me acababa de decir que iba a reintentarlo con su novia).
Me parece injusto que me suelte esas cosas cuando soy yo «la dejada» y la que ha llorado y tenido ansiedad por esta situación y, aún así, me he mantenido fuerte, no le he hablado ni le he dicho cosas bonitas para no añadir leña al fuego. Hemos quedado en mantener el contacto de vez en cuando, que no queremos «perdernos». Obviamente, yo, con la esperanza de que en algún momento lo nuestro fuese posible (tonta de mí).
Chicas, sé que lo que tengo que hacer es pasar página y olvidarme porque sé que, además del cariño/amor que sienta por la ex, su entorno, su edad y la estabilidad que le da volver a su anterior relación le pesan demasiado, pero el corazón me dice que realmente se ha quedado con la espina de no haber intentado nada conmigo (de ahí que se haya encargado de dejar claro que se acuerda de mí constantemente). Tengo la sensación de que no ha cerrado la puerta de un portazo porque tiene dudas respecto a su relación actual y eso, como comprenderéis, me genera ilusiones que me llevan al sufrimiento. No quiero mantenerme a la espera, no es justo para mí, pero no puedo evitarlo. ¿Habéis estado en alguna situación similar? ¿Creéis que me dijo esas cosas simplemente como «premio de consolación»? ¿Creéis que lo mejor es que elimine cualquier contacto con él? Muchas gracias a todas :)