Buenas!
Siempre os leo pero es la primera vez que escribo. Realmente no se si busco consejo o solo desahogarme, pero allá voy.
Nuestro grupo de amig@s se formó hace 15 años, el eje común son los chicos, ya que fueron juntos al colegio mayor. Las chicas nos hemos integrando en ese grupo a lo largo de los años, incluso alguna ya era novia desde el instituto. Es decir, somos un grupo sólido de 8 parejas y 3 solteros. Vivimos casi todos en la misma ciudad y solemos hacer planes juntos. De las parejas todos estamos casados menos una pareja; la historia es sobre los últimos que se casaron, el pasado septiembre.
Se prometieron el año del covid y han pospuesto la boda en 2 ocasiones. Total, que hemos estado escuchando hablar de la boda cada vez que nos juntábamos durante dos años. No han parado en este tiempo de decirnos que tenían un fotógrafo súper guay, un dj súper top, córner de mojitos, que no comiéramos la semana de la boda para ponernos las botas… bueno, y un sin fin de detalles que prometían hacer de esa boda la mejor de nuestras vidas. La única pega hasta ese entonces (por poner alguna) era que nos dijeron que no podía haber niños, solo los de la familia; a mi personalmente no me afecta, pero en nuestro grupo hay 5 niños de varias parejas.
Días antes de la boda nos juntamos unos cuantos para comer y tomar unas cervecitas ya que sabemos que el gran día es un caos para los novios. Hablando y hablando nos enteramos de que no iban a poner las típicas chanclas/alpargatas para las mujeres. Bueno, no pasaba nada aunque ya era un inconveniente porque alguna mencionó que tendría que ir a por unos zapatos más bajos o a comprarse unas sandalias monas con las que poder aguantar. Por otro lado, nos dijeron que tampoco habría autobuses, cosa que dábamos por hecho puesto que el sitio de la boda y celebración estaba a una hora en coche. Se creó un grupo de whatsapp sin los novios para buscar una solución y se propuso un minibús, pero con tan poca antelación no pudimos encontrar nada, y mucho menos asequible.
Hubo un poco de malestar previo por tener que ir en coches, pero decidímos organizarnos. También acordamos que daríamos de regalo 200€ por persona puesto que es lo que SIEMPRE hemos dado para intentar ayudar a los novios con los gastos que conlleva una boda.
El día de la boda todo fue mal desde el minuto uno. Nos habían dicho que no habría niños excepto la familia, pero las amigas de la novia (gente ajena al grupo) SI llevo a sus hijos. La ceremonia duró unos 40 min, al aire libre, con el sol dándonos en el cogote y DE PIE; si si, de pie, porque solo había sillas para los padres de los novios, hermanos, abuelos, sobrinos, y tres amigas de la novia vestidas de rojo con sus respectivas parejas. Eramos 130 invitados, por lo que cabe destacar que más de 100 personas estuvimos ahí de pie aguantando como pudimos.
Llegó el cóctel, y yo estaba deseando meterme unos buenos mojitos entre pecho y espalda. Resultó que allí solo había una barra a la que ibas a pedir tu (no había camareros pasando con bandejas ni de comida ni de bebida), y el mojito estaba ya hecho en unas jarras y lo servían. Solo sabía a seven up y si te caía una hoja de hierbabuena da gracias. Total, que optamos por cervezas. De la comida del cóctel pues… 3 bandejas contadas sobre una mesa. No pudimos probar nada porque la gente se agolpó, se agotó y no hubo más.
Cuando llegamos al banquete pensábamos que venía lo bueno, pero la comida fue un auténtico desastre: de primero un consomé con una yema de huevo y virutas de jamón (a 38 grados no era un plato muy apetecible) y después un solomillo al oporto con patatas panadera. La salsa al oporto era una salida grumosa de color berenjena y el solomillo estaba soso, frío y sangrante; pedimos hacerlo un poco más pero nos dijeron que era catering y no podían cocinar. El vino estaba caliente al punto de tener que pedir hielos.
El top de la cena vino con uña pedazo tarta increíble, aunque era un poco pequeña para todos los que éramos. Se sacaron sus fotos con la espada cortando y comiendo tarta, se llevaron la tarta y lo que vino de vuelta eran unos cupcakes azules.
Nuestro gran grupo estaba sentados en dos mesas distintas, cada una en una punta de la sala. Aquello estaba siendo un desastre y la gente del grupo se estaba cabreando.
Cuando abrieron la barra antes de empezar el baile la gente corrió como loca al candy bar: palmeras y croissants del Mercadona (bendito Mercadona), regalices, chicles, piruletas y Más de aquellos cupcakes azules. Y la tarta? Por ningún lado.
Respecto a la barra libre: de mal en peor. Somos un grupo que bebemos gintonics: tanqueray, seagrams y alguna de las chicas puerto de indias. Ninguna de esas marcas, solo una de puerto de indias para la novia y las damas de honor (las de rojo que comente antes).
El baile comenzó y se marcaron baile TikTok mientras salían unos fuegos y quitaban una cortina en la que había un Neón y un sofá chester para sacarse fotos. También había un Fotomaton, una plataforma que giraba una cámara para grabarte, y la novia se puso una capa con luces.
la gente del grupo, así como el resto de invitados (incluidas las damas de honor) se fueron mis pronto, la gente apenas bailaban, no bebían porque había que conducir… Y nosotros muertos de hambre, sobrios y hartos. Si algo ha caracterizado todas nuestras bodas es que hemos comido y bebido como si no hubiera un mañana.
Total, que esto ha producido un cisma en el grupo porque los que tienen niños están enfadados, el que está al paro está enfadado por el esfuerzo económico que hizo (bueno, en realidad fue esfuerzo económico para todos). Nos habían pintado la boda como la mejor de todas ya que “habían cogido lo mejor de cada boda” (palabras textuales). Desde la boda no nos hemos vuelto a juntar todos y los novios alguna vez han intentado que quedemos todos en su casa para ver el vídeo y las fotos…pero no parece que eso vaya a pasar.
Y vosotras? Habéis estado en una boda de amigos íntimos así?