No te disculpes, en absoluto.
Primero de todo: ERES MARAVILLOSA y seguro que la gente que te rodea te quiere y te admira un montón.
Cierra los ojos e intenta pensar en cualidades estupendas que tengas. ¿Eres buena persona? Seguro que sí. ¿Eres honrada? Seguro que sí. ¿Eres buena amiga de tus amigos? Seguro que sí. Y así, un largo etcétera.
Viví algo similar y todavía sigo trabajando en mi misma (y lo que me queda), pero te aseguro que de todo se sale y que la VIDA vale muchísimo la pena.
Seguro que cuando te consigas quitar las gafas oscuras de la depresión te darás cuenta de que la vida es una maravilla y, sobretodo que TÚ ERES UNA MARAVILLA.
Suerte, y hacia adelante.

Hola, Fer, entiendo como te sientes. En mi caso no tengo buena familia, ni amigos estupendos, por lo que tenerlos y estar mal debe ser el doble de duro. Al final te sientes culpable de estar mal, a que si? Por eso sientes que no sabes hacer nada o que vales poco. Yo pienso mucho en gente que ha salido del pozo y que ha visto esa vida que tú y yo no conseguimos saborear. Y desde su recuperación te dicen «la vida merece la pena, es maravillosa». Yo me agarro a esos testimonios confiando en que algún día podré verlo yo también.
No se si has escuchado el podcast de Ángel Martín (Por si las voces vuelven), te lo recomiendo, sobre todo el episodio con Mercedes Milá.

No sé si te sirve de algo, pero yo estoy en la mierda como tú y puedo entender que quieras quitarte del medio. Y aún así, aunque no te conozco de nada, me daría mucha pena. Fíjate, sé que existes, se que mereces vivir. Y me apena leer tu desesperación. Si yo puedo sentirlo, y no te conozco, espero que te llegue un poco del cariño y que lo sientas como un abrazo.

Ya para terminar. Quizá te haga bien terapia perinatal. Suena a magia potagia pero hay literatura científica que la respalda.

Un abrazo fuerte. Quédate.