Soy aquel chico que hizo el post sobre aquel ramo que quise regalar a una chica a la que apreciaba.
Pues bien, mi autoestima siempre ha sido frágil por la vida que he tenido, mi pasado fue duro, especialmente mi infancia por malos tratos.
Yo mismo por entender lo que es la más vacía soledad y lo duro que es vivir realmente solo cuando tienes mucha mierda encima, empecé a desarrollar una mentalidad en el que la amistad y el amor es lo más valioso a preservar, hice muchos esfuerzos a lo largo de estos años.
Yo creo mucho en la gente, en los vínculos, en las buenas personas, y hago lo imposible por ellos porque no quiero que sufran lo que yo sufrí, soy así.
Con esta chica que conocí sentí una conexión especial, fueron 2 semanas muy intensas, pero era algo que no podía explicar con palabras, pero pude ver su valía, y la admiraba.
Aquel ramo de girasoles no fue el auténtico problema, analizándolo bien, el problema fue que yo no respeté aquel espacio que ella necesitaba, mi ansiedad me hizo tomar malas decisiones, cuando me pidió tiempo no fui capaz de aguantar más de 5 días porque no entendía ni los motivos ni tampoco sabía hasta cuanto tiempo iba a durar, yo mismo me imaginé lo peor y me dejé llevar por mi miedo a perder la relación con ella, fui insistente e impertinente y al final ella malinterpretó la situación, por mucho que yo intentará dialogar con ella, ella no respondía a nada, se limitaba a mantener una posición fija donde no debíamos hablar y teníamos que cortar la relación, esto evidentemente me hace sentir terriblemente mal porque sé de sobra que yo no lo hice por los motivos que ella piensa.
Siento la necesidad de lavar mi imagen, de transmitir de verdad lo que yo quería decir, no puedo dejar que nuestra despedida fuera tan amarga, que todo acabara con un bloqueo por su parte por whatsapp y sin avisar, cuando todo esto fue un error que se podía remediar, no entiendo como ella podía tirar todo lo bonito por la borda, ella misma me decía que nunca le había pasado esto antes con ningún chico, me decía que se sentía apreciada por mi, que le gustaba mucho en todo, y que se sentía muy atraída, y sinceramente os diré, a mi también me hacia sentir lo mismo o incluso más, por eso estoy aquí, pensando todavía en todo lo que ocurrió, leer las conversaciones que teníamos envenena mi ser.
Aunque ella en un principio no quería nada, todo lo que me decía daba a entender que si quería una amistad conmigo, estábamos muy conectados.
Por eso mismo me obcequé, porque pienso que ella no puede ser una mentirosa, pienso que lo que me dijo fue verdad pero que se asustó por la insistencia e impertinencia que tuve a raíz de mi ansiedad y mi miedo a perder la relación con ella.
Al final estos días reflexioné mucho, y me di cuenta de que las personas tienen prejuicios, quizás por malas experiencias pasadas, donde suelen meter a todos en un mismo saco.
Y esos prejuicios son muy difíciles de romper, posiblemente por mucho que intente arreglar esta situación ella nunca quiera entenderlo, cuando alguien se encierra en una idea o en un concepto es muy complicado hacerle entender otra postura, por eso creo que lo único que puedo hacer es corregir mis propios errores, no por ella, si no por mi mismo, y demostrar lo mejor de mi mismo.
Ella se topaba con mucha gentuza, gente que la ignoraba por su aspecto simplemente o gente que solo iba a lo que iba y no daba su brazo a torcer.
Cuando ella me contó sobre esas cosas sentía empatía, la entendí a la perfección, sabía lo que se podía sufrir por ello, en ese momento sentí que tenía que demostrar con acciones y no con palabras que ella me importaba, quería transmitir confianza y cercanía, quería con aquel ramo de girasoles demostrar a esta chica que yo la valoraba y respetaba por lo que era y que me tendría a su lado como un buen amigo.
Era una forma de demostrar que lo que ella me decía estaba presente en mi, pero ella no lo entendió así, se asustó, más tarde comprendí que fue una cagada monumental, lo traté de solucionar, se lo expliqué todo con detalles, mis motivos, mis errores, reconocí mi culpa cuando ella no me decía nada, y yo mismo empecé a reconocer mis defectos, lo que me llevó a perder la relación que había, cuanto más trataba de solucionarlo, de dialogar, peor se ponía todo.
Me sentía tan bien que estaba en una nube, me aferré a su cariño, a esos días geniales, y empezó una parte de mi a sentir miedo, no estoy acostumbrado a recibir algo honesto y sincero, y ese miedo me condujo a la desesperación, y la desesperación por demostrar que no era un gilipollas me hizo al final quedar efectivamente, como un gilipollas, que no respetaba su espacio después de la ruptura, y me arrepiento tanto que ahora mismo siento rabia contra mi mismo.
Al principio todo fue un shock, pero ahora solo es rabia, en mis manos estaba hacer las cosas bien, no estoy acostumbrado a cagar nada, siempre hacía bien las cosas pero aquí no lo hice bien en este aspecto, y no me puedo perdonar algo así.
Lo único que me queda es aprender de mis propios errores, quiero demostrarme a mi mismo que no soy así, que ya no soy así, las personas podemos cambiar nuestros aspectos negativos, y quiero que ella sepa se equivoca conmigo cuando emite ese juicio sobre mi.
Soy más maduro de lo que ella piensa, y muy responsable emocionalmente, y me gustaría una vez arreglados mis problemas o por lo menos controlados, poder hablar con ella una última vez y demostrar que no soy ese chico inmaduro que se apresuró a hacer las cosas demasiado rápido y que la valora y aprecia como realmente es.
Intentaré contactar con ella una vez acabe seguramente la uni o cuando tenga menos estrés, estos meses los aprovecharé para centrarme en mis defectos, y también para retomar mis oposiciones al máximo rendimiento.
Hoy día estoy muy jodido, sin ganas de hacer nada, me siento mal y responsable, la hice sentir incómoda, invadí su espacio, no puedo perdonarme a mi mismo algo así, siento que debo de hacer las cosas bien y dejar de sentir lástima por mi mismo, por eso siento rabia contra mi mismo ahora, eso es lo que me impulsará a cambiar hacia mejor supongo.
No había nada entre nosotros, pero quiero conocerla, construir una amistad en un futuro, pienso que la felicidad siempre debe buscarse y compartirse y por eso pienso que hay que perdonarnos siempre cuando surjan problemas.
Esa es mi forma de entenderlo.
Respetaré su espacio, no diré nada, esperaré a cambiar primero yo, cuando me sienta mejor, cuando vea que ya no soy el mismo tonto que cometió esos errores entonces intentaré contactar con ella una última vez más, y si al final ella se mantiene en su posición y no quiere entenderme por lo menos yo podré quedarme con la conciencia tranquila de que luché al máximo por esto, y que además pude cambiar lo malo.
Nunca más cometeré esos errores.
Si ella de verdad sentía esas cosas que me decía quiero pensar que con el tiempo recordará todo esto.
Quería desahogarme, gracias por leer esto.