No hay ningún dilema, sabes lo que tienes que hacer pero no quieres hacerlo porque crees que te mereces ser egoísta y dejar que le hagan daño a tu hija porque ya has pasado mucho tiempo sola. Ser madre soltera es muy duro y te felicito, pero no te da derecho ahora a dejar de proteger a tu hija de un tiparraco solo porque crees que “te lo mereces”. Madre se es para toda la vida, y ella no es culpable de cómo te trató su padre o de que no hayas encontrado otra pareja.

A ver, que se pueden decir las cosas de otra manera también.

Yo te entiendo porque no tiene que ser nada fácil criar a tu niña sola y si ya normalmente es complicado encontrar un buen compañero, te habrá costado llegar hasta tu pareja actual. A mí me queda claro que sabes de sobra que quien tiene que cambiar es él y que tu hija va primero, pero te aferras a esa idea que tenías de lo que sería vuestra relación y no quieres dejarlo marchar.

Mira, a parte de que lo primero es tu hija y si no se llevan bien esa relación no es viable, yo veo en tu pareja un indicio de algo que luego puede ser mucho peor. Acaba de llegar y te desacredita como madre, las cosas se miden bajo su baremo y lo que tú digas se la suda. ¿De verdad no ves que está sentando las bases de «yo soy el hombre, yo mando y menos mal que he venido para enseñaros»? A mí me daría miedo y repelús a la vez.

En fin, creo que sabes lo que debes hacer.

Yo conocí a un chico cuando mi hija tenía 5 años. Al principio genial, a los 2 años me quedo embarazada después de meses buscándolo. Una vez nació la cria empezó a hacer lo que tu cuentas con la mayor. Parecía que le molestaba y que no hacía nada bien. Intente moderar y sacaba las uñas. Un día se me calentaron los ovarios y le puse las maletas en la puerta. En vez de una tenía dos niñas, pero la paz que llego a mi casa y lo tranquila que se quedo ella no se paga con dinero. Es más importante que ella sea felíz a que lo sea yo.
Con este elemento llevas dos días. No dudes, tu hija no tiene que aguantar nada por un hombre al que eliges tú. Puerta!

Tú hija siempre es lo primero. Fin del dilema.

Tu pareja juzga a tu niña como si fuera una mujer y no lo es. Desgraciadamente a los hombres no les enseñan como debe ser la crianza de los pequeños, es un fallo educacional gordísimo. Si fuera un chico le trataría como un hombrecito y un colega, pero como es chica le exige que sea una mujer y se controle y se comporte como alguien adulto y completo. Ambos casos están mal. Los niños, son niños y necesitan tiempo para crecer.
Si a esto le añadimos que probablemente piensa, muy adentro, que la niña se interpone entre vosotros y vuestras diversiones, tenemos el pack completo.
Si le molesta la compañía ahora, imagina cuando haya convivencia. Intenta hablar con él y que comprenda esto e intente solucionarlo o cambia tu relación para que no coincidan, aunque eso suponga menos intimidad y no convivencis, o corta con él e intenta buscar uno más apropiado.