Hola hola.
Estoy súper indignada.
Me llamo Candela y desde mis nueve años hasta que fui mayor de edad, sufrí abusos sexuales por parte de un primo mío. Abusos que conforme fueron pasando los años se convirtieron en violaciones.
Un día me armé de coraje y le paré los pies cuando lo intentó. Le dije que gritaría. Que se lo contaría a todo el mundo y me dijo que nadie me iba a creer, cómo siempre.
A la semana me pegó una paliza que, sumada a la manipulación a la que me encontraba sometida, me enmudeció por completo.
En 2019 fui mami de una niña Preciosa. Con la maternidad llegó la revelación. Cogí valor, y gracias a una psicóloga maravillosa, se lo solté a toda mi familia.
A las tres semanas, mi hermano me contó que a él también le había pasado con la misma persona.
Hemos denunciado y tenemos pronto las declaraciones.
Mi hermano y yo estamos en tratamiento porque el abuso te deja unas secuelas horribles.
Aún así y con todo esto, mi familia (a excepción de mis padres que nos apoyaron desde el minuto uno), ha decidido hacer como que no pasa nada. Van a cenar todos juntos con esta persona.
Creo que es muy doloroso que las víctimas tengan que ser los verdugos. MUY DOLOROSO.
Necesitaba desahogarme.
Por cierto, mi hermano y yo creamos una página en IG q se llama @somostuvoz.ayuda donde damos VOZ y VISIBILIZAMOS el ABUSO SEXUAL INFANTIL. Damos herramientas a papis, mamis y familiares para prevenirlo y poderlo detectar a tiempo.
Un abrazo amigxs.