Yo soy madre y, si puedo elegir, prefiero que me pregunten antes. El niño puede haber tomado ya mucha azúcar ese día, estar malito de la tripa…pero de ahí a llamar irresponsable a alguien que le ofrece una piruleta me parece que hay un mundo. No lo he hecho nunca y no lo haré. Si no hay impedimento de salud, que esté malo de la tripa o similar, pues muchas gracias y a disfrutar de la piruleta.
Otra cosa es que tú supieras que tu amiga no le ofrece ciertas cosas y actuaras a sus espaldas. Si no es el caso, yo le mandaría un mensaje pidiendo disculpas pero dejando muy claro que no tenías ni idea de sus normas y que hubieses agradecido que te lo explicara de otra forma. Que podrías haber preguntado, pues sí (pero es cierto que a mí es algo que no se me había pasado por la cabeza hasta que fui madre). Que tu amiga se ha pasado mil pueblos, pues también.
Muchas veces no pensamos en estas cosas al ofrecer comida a los niños y yo he tenido ya que intervenir varias veces en el parque porque mi hijo es alérgico y algunas madres van repartiendo alegremente galletas sin preguntar antes. Y a mi hijo lo mandas al hospital con una de esas galletas. Yo, ya te lo he dicho, es algo que no había pensado hasta que fui madre y me vi en la situación.