¡Hola amigas!
llevo tiempo dándole vueltas a este tema, a ver qué opináis vosotras.
Hace un par de año mi mejor amiga empezó a salir con un hombre de 60 años, no en plan sugar daddy porque ella es más exitosa que él. Al principio, este hombre parecía interesado en conocer a su cículo y llevarse bien con ellos, principalmente conmigo. Yo estaba muy receptiva, veía a mi amiga feliz como nunca y siempre estaba dispuesta a hacer planes juntos (a su anterior pareja le costaba mucho quedar con los amigos de ella pero una vez empezamos era majísimo, uno más).
Antes de conocerle mi amiga me contó un par de feos, muy feos, que le había hecho sobre control y engaño, no quiero entrar en detalles pero ella lo escusaba con que podían hablar y solucionar las cosas siempre. Todo bien.
Yo, soy psicóloga, entiendo un poquito de la mente humana. Y aún así vivo una relación en la que he tenido que trabajar mucho en equipo con mi pareja porque a veces entran al juego heridas o demonios personales con los que hay que lidiar. No solo sé profesionalmente si no personalmente, lo he vivido. Ni mucho menos aconsejo a mi amiga desde lo profesional, pero influye saber ciertas pautas de comportamiento.
Después de contarme esos feos, muy feos, fui muy clara con ella «te ha engañado y te está controlando». Ella lo entendió y decidió poner sus límites ante él. Lo solucionaron y bien. Puede parecer que estaban trabajando en la relación en el equipo que son. Yo, desde entonces, no he vuelto a saber nada de esta relación. Y éramos de contarno todo todo y sobre todo, sentimientos.

Esto marcó un precedente antes de conocerle claro está Le conocí. Fui la persona agradable que suelo ser. Y volví a casa con una sensación incómoda. Era un hombre sobervio, mi amiga se hacía pequeñita a su lado, trataba de sobresalir en cualquier conversación y ponía pegas a todo comparándolo a cómo era antes.
Mi pareja había vivido lo mismo que yo y ambos lo atribuímos a que era la primera vez, estaría nervioso y que en el fondo parecía agradable. Lo más importante que mi amiga estaba a gusto con él y él parecía receptivo a hacer planes con sus amigos.
Hubo un par más de quedadas con más amigos y todo eso seguía presente, añadiendo su exceso de confianza conmigo llegándo incluso a moverme la cara de un lado a otro como si de un tortazo se tratase mientras me decía que me callase porque estaba hablando y quería hablar él. Estaba borracho. Y todos los presentes flipamos. Yo me defendí obviamente, y todo pareció quedar en una anécdota. Para mí no, y lo hablé de forma individual con los presentes y a todos los pareció preocupante.
Nunca lo volví a mencionar con mi amiga y, como os decía arriba, cada vez me cuenta menos cosas sobre la relación.
Hubo algún encuentro más y él con la misma actitud sobervia y sobre todo hacia mí. En definitiva, es así y probablemente no le caiga bien yo. Él tampoco a mí. Y de verdad, lo he intentado, lo sigo intentando pensando que son cosas mías (aunque algunas las corroboran otras personas presentes), que estará nervioso o fuera de su zona de confort, que irá cogiendo confianza,…
Pero siempre que me planteo eso y volvemos a vernos, es todo igual.
En total nos habremos visto unas 10 veces, cada una igual de incómoda.
Yo he intentado dejar de contar con él en quedadas de grupo o preguntarle menos a mi amiga por él, pero es que no puedo evitar tener en cuenta a una persona importante para ella, me sale solo. Aún así él ha dejado de participar el actividades de grupo estando o no invitado directamente. No ha vuelto a nada. Es como si hubiera desaparecido. Pero no, ella sigue un poco controlada por su relación y los hobbies que tiene con él.

En general, desde que empezó esta relación, ella ha dejado de ser la mujer libre que siempre ha sido incluso con su pareja anterior. Ha perdido su jovialidad y su energía. Nosotras quedamos y está bien, todo normal. Entiendo que al inicio de una relación también tengas menos disponibilidad y ella siempre está muy liada con cosas del trabajo. Pero siento que está desapareciendo por este señor. Nos quedan 4 cosas que siempre celebramos al año y la cotideanidad bueno, ya no la tenemos.
Yo probablemente tenga que irme por trabajo de nuevo, y sinceramente, temo dejarla aquí con él. La primera vez la absorvió hasta el punto que os cuento, ¿qué será lo siguiente?

Tengo miedo de que mi amiga no esté tan bien como parece. Cuando hablábamos al principio de esa relación siempre le dejé claro que yo estaría para todo, lo bueno y lo malo, daba igual qué pasase o con quién. Ella sabe que estoy y trato de demostrárselo siempre que nos vemos. Ambas nos ayudamos mucho.
También tengo miedo de hablar claro sobre su pareja con ella, creo que no es algo agradable escuchar que a tu mejor amiga no le gusta tu novio. Ya lo hice una vez tras la segunda vez de conocerle, fui muy clara con ella, sobre todo por los precedentes que os conté arriba, y le dije que se tenía que ganar más mi confianza que la suya, y que yo sería la que estuviese ahí vigilando si le hacía daño. Todas las cartas están sobre la mesa.
¿Y ahora qué hago?

¡Muchas gracias por leerme!