Hola chicas,
Hoy vengo a desahogarme a este foro que tantos buenos ratos me ha dado. Conocí a un chico hace 9 meses a través de una app que juré nunca me instalaría. El chico en cuestión, para mí, es casi perfecto, pero él no ha hecho el clic que supuestamente hacemos cuando queremos ir en serio con alguien. Él es de mente analítica, poco de corazón, todo cerebro, y hasta que no analiza todo, no llega a una conclusión (os podéis imaginar…).Puedo decir que le quiero con todos sus defectos, o por lo menos con los que me ha dejado ver en todo este tiempo.
Aparentemente, todo era como en una relación pero él no estaba al 100%, y yo lo he notado en todos estos meses.
En este tiempo hemos vivido de todo, incluso una ruptura que acabó con arrepentimiento por su parte, con ramo de flores incluido y una segunda historia de amor, muy bonita.
Hace unas semanas, hemos vuelto a dejarlo: yo no quiero sufrir porque él no esté al 100% y él por fin ha entendido que, en ese sentido, me hace daño (aunque en general, carece de empatía, pero lo ha entendido)
Así que ahora me veo aquí escribiendo, bastante tocada y deseando que vuelva, como ya lo hizo una vez. Así que necesito escribirle unas líneas que, si lee, le despierten en su corazoncito de ingeniero una luz que le conduzca hacia mí.
A ti,
Que no te he sabido dejar tu tiempo y espacio y no todos tenemos los mismos tiempos, quiero que sepas que no lo eres todo para mí, pero que eres una persona muy importante y quiero elegirte como compañero de viaje. Que me he dejado la piel contigo y que sé que no has sabido gestionar todos los sentimientos que yo te he querido transmitir.
Que tu razón te dice que quieres una relación estable, pero tu subconsciente te hace huir cuando no sabes lidiar con tantas emociones. No te preocupes, porque hasta donde yo llegue, te podré acompañar en ese crecimiento personal. Sólo déjame acompañarte.
No quiero dejarte ir porque soy de la opinión de luchar por lo que uno quiere y tú eres parte de eso que quiero tener en mi vida. Que seguir viéndote, después de dejarlo, es muy doloroso, pero lo sería aún más si no te volviese a ver nunca. Y cada vez que pienso en construir un muro entre tú y yo, siento un escalofrío que me recorre el cuerpo entero; que sería idiota si lo hiciese porque ambos sabemos que podríamos formar un gran equipo.
Vamos a construir juntos eso que llevamos tiempo buscando: algo sano, bonito y sólido. Sin miedos y con las ganas de tenernos. Vamos a aprender juntos. Si aún estamos a tiempo, ¿quieres ser mi compañero de viaje?