Tranquila que todo el mundo te dirá que tu vales mucho, que ellos se lo pierden, que eres estupenda, que si no saben entenderte es culpa de ellos, y todo lo demás.
Es curioso.
A mi después de varias relaciones, la más larga de cuatro años y medio, también me cuesta horrores confiar en las mujeres.
Pero hay una diferencia: Mientras que tu tendrás el apoyo de todo el mundo, los hombres no.
Y de nadie.
Nadie en absoluto.
(Nada era una simple reflexión para cuando os sintáis jodidas cada dos días porque se ha caído el Tinder, o porque no tenéis 7 mensajes y 15 likes en Instagram en vuestra última foto).