Hola chicas,
me ayudáis, por favor?? Estoy un poco triste y perdida.
Llevo viviendo en Asturias 4 años y desde hace 1 y medio salgo con el que considero el amor de mi vida. Tras 6 años soltera y sin haberme enamorado desde los 18, a los 34 conocí a la persona con la que me gustaría estar siempre.
Antes de conocerle, yo vivía en una ciudad en la que me encontraba a gusto pero ya tenía pensado irme a otra Comunidad Autónoma puesto que en la empresa en la que estaba las cosas se estaban poniendo feas y, además, siempre fui un alma nómada puesto que había estado cambiando de ciudades cada 2 ó 3 años. De hecho, esa fue una de las razones por las que me decidí a estudiar enfermería ya de mayor; poder ir de un lado para otro a mi antojo.
Otra razón importante por la que quería irme era el clima; yo soy del sur y, aunque prefiero vivir en el norte, la falta de luz y la lluvia frecuente me tenía un poco depre ya. Así que todo eso conformaba el perfecto caldo de cultivo para poner rumbo a mi próximo destino.
Ja! pues el destino me tenía preparada una emboscada :) de pronto conocí a mi chico, con el que llevo ya conviviendo (por primera vez en mi vida) varios meses. Desde el principio tuvimos esta conversación en la que le dije un poco lo mismo que a vosotras; que estaba ya cansada del sitio y le estaba empezando a coger un poco de manía, y tenía un pie fuera PERO que me parecía que merecía la pena y quería seguir conociéndole un poco más para ver qué tal. Y que si él iba en serio, porque si no cogía y me iba. Total que con respecto a él, y hasta día de hoy, todo va viento en popa. Es un amor profundo el que sentimos el uno por el otro y sabemos que nunca habíamos conectado con nadie así antes y que será muy difícil que vuelva a ocurrir algo similar (con esto simplemente quiero haceros entender que no es una relación cualquiera).
Él no es de Gijón si no de Oviedo, y cuando ya me fui de la empresa en la que estaba de pronto encontré una oferta increíble en Oviedo. Todo parecía que ahora jugaba en mi favor para que pudiera seguir con la relación. Me mudé allí y al cabo de unos meses al fin nos fuimos juntos.
¿Cuál es el problema? Sigo odiando esto. Cada día más. Si ya no me gustaba mucho, ahora menos. Además, en Oviedo si cabe me encuentro peor.
Para mí el tema del trabajo, a pesar de ser un gran trabajo, no me importa perderlo porque prevalece la aventura por descubrir nuevos destinos en los que asentarme una temporada. Y a veces pienso que vale, sí estoy dispuesta a renunciar a esa vida nómada por él porque merece la pena, pero con lo que no puedo es con el lugar. Me deprime. No salgo, no hago absolutamente nada en todo el día porque no me motiva nada. Tampoco he conocido a mucha gente y bueno, siento profundamente (y desde hace varios años) que este no es mi lugar, que es un mero lugar de paso. Pero, ahora qué? Si me pongo a pensar que me voy a quedar aquí para siempre me vengo más abajo. De hecho, es que ni siquiera me lo creo.
Por supuesto, esto lo hemos hablado en numerosas ocasiones porque cada poco me da la bajona (como ahora), y creo que no hay día que no lidie con ello, pero él no piensa ni en dejar el trabajo ni tampoco la ciudad. Además él quiere comprar y vivir en un piso (yo aceptaría vivir en un pueblo cercano en alguna pequeña casa) y tenemos asumido que lo comprará él para sí, porque yo es que no estoy en absoluto interesada. Sería como invertir en… no sé, en pimientos!
No sé, no he conocido a nadie así en mi vida y este vínculo no quiero perderlo, pero esto otro, lo entendáis o no, me está matando.
Gracias, gracias, gracias.
Gracias por leerme y dejar que me desahogara.