Vengo a desahogarme.
El lunes me presente a una oposición de lo mío, sólo dos plazas. Sé perfectamente que ninguna de esas dos plazas son para mí, pues por puntos no puedo competir con gente que lleva 20 años trabajando en la administración, pero mi intención era sacar la nota más alta para poder estar en la bolsa de trabajo.
El examen fue mal. 60 preguntas, para aprobar minímo 30 preguntas. Conteste 25 bien, arriesgue en 14 preguntas, y había unas 4 ó 5 que dudaba mucho, y opte por no contestarlas. Resultado me deje 20 preguntas sin contestar, muchas preguntas, demasiadas, me daba miedo meter la mata. Consciente de que podría aprobar por los pelos, o suspender por muy poco.
Hoy han publicado la plantilla provisional. De las 14 que arriesgué he fallado 5 preguntas, dos por no leer bien. Restultado provisional, sobre 32 puntos he calculado. (los fallos restan), estoy aprobada por los pelos. No canto victoria, pues hasta que no salgan los resultados definitivos no voy a estar tranquila.
El caso es que llevo desde que hice el examen ploff, cansada, agotada, sin ganas de nada, y hoy, al ver la plantilla he roto a llorar. Esperaba un poco de compresión por mi entorno, la respuesta de mi madre: «no siempre se puede aprobar», mi padre «al menos lo has intentado», y me han acabado de hundir. Sé que lo dicen con la mejor intención, pero cuando alguien se esfuerza en sacarse una oposición (trabajando a la vez), y el resultado no es el esperado, un poco de compresión no vendría mal.
A la espera de que salgan los resultados definitivos estoy «en un all», y no las tengo todas comnigo. De las que tengo mal, no puedo impugnar ningunar.
Lo que más rabia me da de todo esto, es que las 5 de reserva, las tengo bien :(
Gracias por leerme.