Buenas tardes queridas, vengo un poco a por consejo y otro poco para desahogarme porque no puedo más con la gente.
Empiezo contando que tengo un negocio es una tienda de merchandising así que haceros una idea de lo que es. Además de cosas de todo tipo de series, películas, libros… vendo figuras bastante molonas de esas de mírame y no me toques. Soy una persona muy alegre y me gusta que todo el que entra en mi tienda disfrute y haya siempre muy buen rollo. Pero esta tarde he sobrepasado mi límite y ahora no sé si arrepentirme o hice bien o no…
Es que en 3 años es la primera vez que me enfrento a algo así y llevo un rato bastante nerviosa. Necesito de vuestra objetividad.
La cuestión es que entró en la tienda una pareja, los vi en seguida que empezaban a toquetearlo todo y les dije de muy buenas maneras que por favor intentaran manipular lo menos posible. Después vi que el chico se bajaba la mascarilla y desde el mostrador, con mi sonrisa, le pedí que se la colocara aunque en ese momento estuviésemos solo los tres dentro de la tienda.
Siguieron paseando y tocándolo todo, pasado un rato les dije que por favor mirasen solo porque iba a tener que desinfectar después toda la tienda. Se fueron hacia el fondo donde tengo un expositor con figuras manga de las caras y un cartel enorme que pone ‘SE RUEGA NO TOCAR’ y a los 2 minutos escucho un golpe y veo una de las figuras hecha añicos en el suelo. 1.200 euros de figura. El chico estaba al lado de la estantería con cara de susto y se me pasó el buen rollo y le dije que si no había visto el cartel. Pues los dos me dijeron que no habían tocado nada que se había caído sola.
En tres años nunca jamás se ha ni siquiera movido ni una de esas figuras, están fijas y ni se tambalean, a no ser que las toques. Se iba ya hacia la puerta y les dije que de eso nada, que me tenían que pagar la figura y los dos se pusieron como locos diciéndome de todo. No sabía cómo actuar porque veía que se iban y que yo me iba a quedar allí muerta de rabia y les dije que me tenían que dar un contacto o algo. Y la chica venga decirme que eso lo cubre el seguro. Sí, seguramente, pero no puede ser ir por la vida haciendo lo que te de la gana.
Al final se han negado a darme sus datos y se han ido. No contentos con eso a la media hora me ha llegado un aviso de Google de que alguien había dejado una reseña de mi negocio. Una estrella y una frase: Atención pésima, encima la tía una ladrona porque nos quería hacer pagar una figura que no queríamos.
No sé como puede haber gente tan hija de p*ta en el mundo. Tres años llevo con la sonrisa en la cara y hoy solo quiero mandarlo todo a la mierda. Encima que me digan que soy mala atendiendo… No puedo más.