No le des importancia a la edad, solo son números, la edad no nos hace mas o menos maduros, al final son las vivencias de cada uno lo que nos hacer ser como somos o tener la madurez que tenemos yo por cuestiones de la vida mi madre con una enfermedad crónica desde que yo tengo dos años y un largo etc mas de enfermedades de mi madre y hermano menor, tengo mucha madurez desde muy joven probablemente si no hubiese pasado nada de eso en mi familia yo no seria como soy, porque la madurez nos viene dada de cada hostia que nos ha llegado en la vida eso es así la verdad.
Yo tengo 28 mi pareja 35, llevamos juntos 4 años, y 1 año y medio viviendo juntos, tengo mi grupo de amigos de toda la vida que tenemos la misma edad todos, pero tengo otro grupo de amigos con los que salgo casi siempre, ninguno tiene menos de 33 años y me lo paso teta con ellos de verdad la edad no es nada, la edad son números y ya esta no condiciona nada, no creo que te vea como un niñato, ademas tienes 30 años, no 18 recién cumplidos. Tu disfruta de la relación, si tiene que salir mal va a salir mal por la edad o por cualquier otra cosa que pueda salir mal como si tuvieses una relación con una mujer de tu edad. Así que disfruta de la relación, disfruta de tu novia y de la vida en general…y lo que tenga que ser, será.

Me he sentido tan identificada. Hace 3 años conocí a un hombre 17 años mayor que yo. En el trabajo yo tenía 19 años y el 36. Dejé a mi pareja que tenía y lo intentamos. Tenía los mismos miedos y las mismas inseguridades. 3 años después tenemos una hija preciosa y somos muy felices. Solo te puedo decir que disfrutes del momento y que todo fluya no te calientes la cabeza en esas cosas porque vas a seguir creciendo y madurando

Hola!

Te doy mi propio ejemplo y un consejo. La edad no existe. Es la mentalidad de ambos lo que importa y el resto del mundo se puede ir de paseo. Ahora tengo 32 años. Cuando cumplí 20, estaba con un chico 2 años menor que yo y esa relación duró 4 años. Tras 2 años creo, conocí a un hombre por un grupo de música de facebook. Un día me atreví y le invité a ir juntos a un concierto. Ahí empezó nuestra amistad. Al año siguiente, se me declaró y me di cuenta de mis propios sentimientos. Ya han pasado 7 años. Con todo lo que he vivido te puedo decir que estoy viva. Soy libre y mi mente puede hablar. Además de hablar con alguien que piensa, siente y vive las cosas que yo necesitaba vivir. Que me comprende, me mima, me adora y me protege y al revés. Lo comprendo, lo mimo, lo adoro y lo protejo como nunca antes se lo habían hecho. He encontrado mi sitio, mi amor y mi mundo. Te cuento todo esto porque como te he dicho yo tengo 32 años y y el en octubre cumplirá 52 años. Nos llevamos justo 20 años. Jamás vi su edad. No hay diferencias. Y lo gracioso es que a ambos nos echan menos edad. Jajajja sobre todo a él, que siempre le dice la edad que tiene los demás se sienten viejos. Jajaja tiene un metabolismo fantástico y sobre todo de lo que trabaja, que es muy duro.

No te fijes en la edad. Solo en lo que sientes. Lo que vivís y compartís. Ve dejándote llevar y viendo qué es lo que te llega. Todo depende de la persona, y su mente. Porque no todo el mundo es igual. Si estáis destinados, lucha. Y que se joda el mundo. Porque vais a generar mucha envidia. Sobre todo libertad. No tengas miedo a nada.

No sé si te valdrá mi opinión porque yo no estoy en esa situación pero te cuento como lo veo yo desde fuera. No es tan importante la edad como estar en la misma etapa vital. A los 41 años una mujer quizás se plantea cosas diferentes, por desgracia la biología trata a las mujeres cruelmente y a esa edad suelen ser tus últimas oportunidades para ser madre biológica, si es que ella lo quisiera, esos temas hay que tenerlos muy en cuenta a la hora de tener una relación, Por qué no estamos como para perder el tiempo.

Aparte de tener esa conversación y lo demás no tiene porque variar en nada

Hola.
No creo que la madurez llegue a ser un problema tan grave en este caso, pues ya los dos sois adultos y tenéis cierta experiencia.

Si pienso que deberías reflexionar de cara al futuro, es decir, no sólo en cómo de maduro te vea ella ahora mismo, sino en cómo os pudierais gestionar en el futuro: hijos, relaciones sexuales (las necesidades y problemas que puedan surgir), etc. ¿Estarás preparado para estas cuestiones?