Seguro que conoces la crema Nivea del tarro azul, ya nuestras abuelas y madres la usaban desde siempre como hidratante facial. Yo era reticente porque me parecía demasiado grasa hasta que me quedé embarazada y la matrona me la recomendó, desde entonces no falta en mi casa.

Os cuento los usos que le damos y el por qué se nos ha hecho tan necesaria.

Como os comentaba, en el embarazo me empezaron a salir muchas estrías en la zona alta de las caderas, me gasté mucho dinero en cremas de farmacia, pero seguían apareciendo. Un día en la revisión de la matrona me recomendó la Nivea del tarro azul mezclada con un poco de aceite de almendras y fue fascinante como frenó la aparición de las estrías y redujo las que ya tenía. Y lo mejor es que me costaba un tercio menos comparándola con las de farmacia.
Para aclarar axilas y codos. Hay que ser constante y ponerla a diario en esta zona, con los codos no solo aclara la piel sino que le quita ese aspecto cuarteado que va tomando con el paso del tiempo.
En los labios, cuando los tengo irritados y quemados del frio, aplico una capa muy fina y la dejo toda la noche, desaparecen hasta esas antiestéticas rayitas que tenemos en ellos.
Para la depilación, para el después por supuesto, ayuda con la rojez y la inflamación de la zona depilada, pero un truco es aplicarla si te vas a pasar la cuchilla en las piernas, al ser tan grasa hace que la hoja se deslice sin problema y deja la piel espectacular, lista para salir a enseñar piernas. Además que previene la aparición de vellos enquistados.
Este truquillo que os cuento ahora, lo hago cada quince días desde que me hice las mechas, antes no lo he necesitado. Después de hacerme las mechas el pelo se empezó a estropear bastante, tenía un aspecto pajizo y buscando soluciones por internet, di con quien se aplicaba la crema Nivea como mascarilla. La pongo de medios a puntas, las dejo actuar unos veinte minutos y después me aclaro muy muy bien. El resultado es espectacular, me deja el pelo hidratado y brillante durante días. Los primeros incluso, se queda como si me hubiese pasado la plancha.
En la zona de la ojera, aplico una capa muy fina antes de ir a dormir y estas se han reducido, en este caso no de forma espectacular, pero sí se nota la diferencia cuando paso unos días sin ponérmela.
En todo el rostro, con una capsulita de vitamina E, la dejo actuar durante vente minutos después la retiro con agua y una esponja natural y deja la piel perfecta. Esto lo hago antes de maquillarme si tengo algún evento importante.
Y por último, para los zapatos y bolsos de piel. No son pocas veces las que han acabado cuarteados y con la piel descamada por el paso del tiempo. Así que antes de guardarlo para la siguiente temporada, aplico una capa de Nivea y esto hace que se conserven de maravilla.