¡Ponle sabor a la vida!

Eso intentamos cada vez que buscamos recetas ricas, diferentes y divertidas para nuestros vosotr@s.

Yo soy muy fan de los trampantojos y más de una vez se me ha ocurrido hacer alguna que otra receta que parezca dulce, pero luego es salada y ni te imaginas lo que triunfa.

 

Mousse de aguacate. ¡Increíble! Necesitas dos aguacates, zumo de limón, nata para montar sin azúcar, cilantro, sal y gelatina. Lo primero que tienes que hacer es aplastar los dos aguacates con un tenedor y añadir el zumo de limón. Pica finito el cilantro y añádelo. Ponle un poco de sal al gusto. Coge un tetrabrik de nata para montar pequeño y móntalo cuando esté fresquito. Mientras haces todo esto, deberías tener mientras dos hojas de gelatina hidratando. Cuando estén hidratadas, ponla en un cacito con agua y dilúyelas. Cuando esté lista, añade la gelatina a la mezcla y repárela en pequeños recipientes fáciles de desmoldar. Déjalos en la nevera como mínimo dos horas y sírvelos con un poquito de salmón ahumado. ¡Triunfo total!

Muffins de calabacín. ¡Trampantojo en toda regla! Para esta receta necesitas dos calabacines pequeños, dos vasos de leche, tres huevos, 200 gramos de harina y un sobre de levadura y sal y pimienta al gusto. Lavamos los calabacines, los rallamos y escurrimos hasta quitar toda el agua. Los rehogamos un poco y reservamos. Mezclamos por un lado la leche con los huevos y por otro la levadura y la harina. Lo incorporamos hasta que queda una masa en conjunto y añadimos los calabacines y un poco de queso rallado si te apetece. Cogemos moldes de magdalenas, ya sean individuales o en bandeja, los engrasamos y añadimos la mezcla. ¡Recuerda llenar dos tercios de la capacidad para que no se desparrame todo! Con el horno previamente precalentado, déjalos a 180 grados durante 25 minutos y verás qué fantasía.

Donuts de atún. ¡Facilísima! Solo tiene tres ingredientes: 3 huevos, atún al natural y una pizca de sal al gusto. Coge 3 huevos y dos latas de atún y tritúralo todo junto. Echa sal y especias al gusto. Coge un molde de donuts, engrásalo y ponlo 4 minutos en el microondas. Antes de sacar esta maravilla, deja enfriar un poquito. Puedes ponerles tomatito y parmesano por encima, o queso crema y aceitunas negras. Es una cena 10.

Galletas saladas de especias. Para un picoteo es lo mejor del mundo. Solo necesitas una tarrina de queso de untar a las finas hierbas de unos 125 gramos, 50 gramos de mantequilla y 125 gramos de harina. Para hacerlas no necesitas mucho. Derrite un poco la mantequilla, añade el queso de untar y mézclalo. Incluye poco a poco la harina en la mezcla e intenta que no queden grumos y echa una pizca de sal. Haz una bola y deja reposar unos minutos, luego extiende la masa para que quede uniforme. Enróllala a modo de tuvo y ves cortando las galletitas. Intenta el grosor de cada galletita no sea de más de un 1 cm. Pon el horno a precalentar a 180 grados y déjalas 10 minutos. Las puedes comer solas o untadas con algún dip o paté. ¡Están de muerte!

Trufas de morcilla y manzana. ¡Es una tapita genial! Se hace en un momento y suele ser toda una sorpresa para tus invitados. Solo necesitas 250 gramos de morcilla, una manzana, cacao puro en polvo y un chorrito de aceite. Pela y corta la manzana a trocitos. Saltéala hasta que quede blandita. Aplastamos la morcilla con la manzanita pochada gracias a la ayuda de un tenedor. Hacemos bolitas con esta mezcla y las rebozamos en cacao. Si no te cuadra mucho esa mezcla de dulce y salado, las puedes rebozar en semillas de sésamo. Con el horno precalentado a 200 grados, las dejamos entre 3 o 5 minutos, todo depende del tamaño de las trufas.  Tómalas templaditas y si las acompañas de un vermut, mejor que mejor.

¡Disfruta tanto de la preparación de estas recetas como de su exquisito sabor!